Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Cospedal gana peso como ministra y se refuerza ante el congreso del PP

María Dolores de Cospedal, antes de fotografiarse para su credencial del Congreso.

Luz Sanchis

Cuando más arrecian las críticas sobre la compatibilidad de sus cargos de ministra de Defensa y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal ha logrado atajar la crisis abierta a raíz del informe del Consejo de Estado que responsabiliza a la gestión de Federico Trillo en el accidente del Yak-42. La decisión de asumir las conclusiones del informe ha descolocado a algunos compañeros de Gabinete y de partido, que daban por hecho que lo contradiría.

Recibir a los familiares en el Ministerio y escuchar sus promesas de tratar de investigar lo ocurrido con la subcontratación del vuelo que se estrelló en Turquía ha supuesto lo más parecido a una petición de perdón en nombre del Gobierno de Mariano Rajoy. Al menos, así lo entendieron las víctimas. “La palabra 'perdón' no se ha dicho, pero tiene una clara intención de esclarecer los hechos”, resumió Francisco Cardona, padre de uno de los militares fallecidos.

El contraste de su comportamiento con la primera reacción de Rajoy, que aseguró mientras estaba de vacaciones en Galicia que no sabía que se había desvelado el informe y que era algo que había ocurrido “hace muchísimos años”, ha logrado reconducir la polémica mientras los partidos políticos contaban con tener una nueva baza para desgastar al Ejecutivo. Curra Ripollés, hermana de otro de los militares muertos, le hizo el mejor elogio: “Ha actuado como ministra y no como miembro de un partido político”.

Su comparecencia ante la comisión parlamentaria correspondiente pretende además atajar las exigencias de que sea su jefe quien dé la cara ante el Pleno del Congreso, como pretenden Unidos Podemos, Compromís y ERC y respaldan los socialistas.

En su rivalidad con Sáenz de Santamaría, Cospedal sale así reforzada dentro del gabinete ya que, aunque se trata de uno de los llamados ministerios de Estado, el peso político del área es menor que el de la vicepresidenta. Pero mientras la número dos del Gobierno se esfuerza por tratar de reconducir las relaciones con la Generalitat que preside Carles Puigdemont, los avances son mínimos.

Con este panorama, Cospedal encara el congreso del PP y las discusiones sobre su pluriempleo con más seguridad que hace unas semanas. Los conservadores tienen asumido que repetirá en el cargo y que su nombre será el primero en acompañar al de Rajoy como presidente del partido dentro de su candidatura.

Etiquetas
stats