Díaz Moñux se sentía amenazado por el hijastro de Oubiña, según un acusado

El abogado madrileño Alfonso Díaz Moñux, asesinado en el 18 de diciembre de 2008, se sentía amenazado por David Pérez Lago, hijastro del narcotraficante gallego Laureano Oubiña, ha expuesto hoy la defensa de uno de los ocho acusados, Jhony Alexander E.O., en la Audiencia Provincial de Madrid.

Tras la selección del jurado popular, hoy ha comenzado en la Audiencia madrileña el juicio a los ocho procesados, para quienes la Fiscalía solicita entre quince y veinticuatro años de prisión por los delitos de asesinato alevoso mediante precio, conspiración para cometer asesinato y tenencia de armas de fuego sin licencia.

Díaz Moñux y su compañera, María Tania V.O., eran representantes legales de David Pérez Lago, hijastro de Laureano Oubiña, en causas relacionadas con el narcotráfico, ha explicado la defensa de Jhony Alexander E.O.

Antes de su muerte, Díaz Moñux interpuso denuncias ante la Policía porque tenía miedo de que lo mataran y porque se sentía perseguido, además de presentar una queja ante el Colegio de Abogados.

En el banquillo de los acusados, se sientan los ciudadanos de origen colombiano José Alexander A.A.; Jhony Alexander E.O.; Jhon Edwars M.F. e Ibrahim A.A., junto a los españoles Fernando G.H.; Javier G.H.; Francisco G.A. y Miguel Ángel D.A.

En sus escritos de defensa, los procesados han negado su participación en los hechos, haber mantenido reuniones para planificar el asesinato de Díaz Moñux, haber realizado seguimientos a la víctima, haber elaborado un informe sobre las vigilancias y haber utilizado el arma que causó la muerte del letrado.

El presidente del tribunal del jurado ha acordado pedir a la Dirección General de la Policía la localización del domicilio y del paradero de la compañera sentimental del abogado asesinado, María Tania V.O., que fue testigo presencial de los hechos, y del dueño de una cervecería de la localidad madrileña de Galapagar, Óscar J.R., donde tuvo lugar una reunión entre algunos de los acusados para preparar el asesinato.

Los abogados de los procesados han destacado que la declaración de María Tania V.O. es “una prueba fundamental” en el juicio, mientras que los letrados de los familiares de la víctima han considerado esta petición como “una artimaña” para alargar el procedimiento.

En su intervención, el fiscal ha dicho que este juicio es “la crónica de una muerte anunciada”, ya que, tras pasar “un calvario de varios meses de amenazas”, el abogado Alfonso Díaz Moñux fue asesinado por personas que habían sido contratadas con tal finalidad.

El representante del Ministerio Público ha explicado que, para probar los hechos, se contará con las declaraciones de testigos presenciales que vieron cómo dos individuos salían huyendo del lugar de los hechos, así como de los procesados y de los peritos que analizaron las comunicaciones telefónicas de los acusados.

El abogado Alfonso Díaz Moñux fue tiroteado sobre las 21:30 horas del 18 de diciembre de 2008, cuando, junto a su compañera sentimental, accedía al garaje de su vivienda, situada en el número catorce de la calle Antonio Rodríguez Villa, en el madrileño distrito de Chamartín.

Dos de los procesados los esperaban a la entrada del lugar y uno de ellos efectuó dos disparos a corta distancia, que atravesaron la ventanilla del conductor e hirieron al abogado en la cabeza.

Tras ser asistido por los servicios sanitarios de emergencia, Alfonso D.M. fue trasladado al Hospital Gregorio Marañón de Madrid, donde falleció al día siguiente por parada cardiorrespiratoria.