EE.UU. solo ha conseguido entrenar a 60 milicianos sirios para atacar al EI

El secretario de Defensa de EEUU, Ash Carter, mostró hoy su frustración porque los militares de su país solo han conseguido hasta el momento entrenar a 60 opositores moderados sirios para luchar contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), pero confía en que el proceso se acelere.

“Hasta el 3 de julio, habíamos entrenado a 60 combatientes. Este número es mucho menor del que esperábamos”, admitió el secretario de Defensa.

“Buscamos modos de acelerar el proceso de selección del programa de entrenamiento y equipamiento”, explicó Carter en una audiencia del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado.

Estados Unidos esperaba poder entrenar en un año a 5.000 milicianos moderados para enfrentarse al EI sobre el terreno en Siria.

La cifra dada por Carter es tan baja que es incluso menor al número de instructores militares que Estados Unidos consideraba necesarios para comenzar estas operaciones, de alrededor de 400 efectivos.

Carter señaló que entrevistan a 7.000 posibles milicianos para sumarse a las fuerzas que luchan contra el EI en Siria, pero el proceso es muy exigente para evitar la infiltración del enemigo en estos campos de entrenamiento, que se establecen en países vecinos de la región.

El responsable de las Fuerzas Armadas de EEUU reconoció que hasta el momento solo las fuerzas kurdas, a las que suministran armamento, pueden contener los avances de los yihadistas en Siria, mientras que en Irak también son la fuerza más fiable.

En Irak, dijo Carter, EEUU arma a los “peshmerga” (tropas kurdas iraquíes) a través del Gobierno del primer ministro iraquí, Haider al Abadi, de la mayoría musulmana chií.

“Aceleramos el envío de equipamiento esencial a las fuerzas de seguridad iraquíes y trabajamos con el Gobierno iraquí para que pase rápidamente ese material a los 'peshmerga' kurdos y las tribus suníes. En Siria, armaremos a esas fuerzas en cuanto completen el entrenamiento”, explicó Carter.

Para acabar con el EI, que ocupa importantes territorios en Siria e Irak y ciudades claves como Al Raqqa, Palmira, Mosul o Ramadi, el secretario de Defensa estadounidense dijo que será esencial para su país tener un socio musulmán suní fiable.

Estados Unidos apoya a las fuerzas kurdas y del Gobierno central iraquí desde el aire y con el envío de 3.550 asesores militares, mientras que se niega a adoptar una función de combate directo sobre el terreno.