ERC avisa de que la “voluntad democrática” de los catalanes no se “sepultará” con las amenazas

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardá, ha advertido hoy de que la “voluntad democrática” de los catalanes para votar el 1 de octubre en el referéndum soberanista no quedará “sepultada” por “temor o amenazas”.

“Si alguien cree” que así ocurrirá “no asume dónde vivimos”, ha dicho Tardá, quien en rueda de prensa se ha mostrado convencido de que “todo saldrá bien” el 1 de octubre y los catalanes podrán votar.

Para el portavoz de ERC, las movilizaciones de la Diada demostraron esa voluntad de los catalanes, y ayer, además, se produjo otra “gran noticia” cuando la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, dijo que haría “todo, todo lo posible” para que se pudiera votar “con normalidad” en la capital catalana.

Ha recordado que en Barcelona, en cualquier caso, solo el 30 por ciento de los colegios electorales depende directamente del municipio, y ha admitido que es posible que haya un porcentaje de mesas que tengan que instalarse en sitios distintos a los habituales. Algo que puede ser una molestia pero también “un acicate” para acudir a votar.

Joan Tardá ha insistido en que el 1-O se celebrará “con todas las garantías” de la ley del referéndum aprobada por el Parlament, que ha considerado “legal y legítima” a pesar de haber sido suspendida por el Tribunal Constitucional.

No ha negado Tardá la preocupación por que pueda haber incidentes. “Si yo les dijera que no me preocupa mentiría”, ha señalado, y ha añadido, sobre la actuación que puedan tener las fuerzas de seguridad, que “hagan lo que consideren oportuno”.

En cuanto al futuro de los diputados de ERC en el Congreso, ha señalado que harán lo que les diga el Govern. “Si nos dice que nos vayamos a Cataluña nos iremos y si dice de quedarse nos quedamos”.

Ha apuntado, en cualquier caso, que los “periodos de transición a la independencia” se dilatan en el tiempo y tras el referéndum, si gana el 'sí', “tiene que haber elecciones constituyentes”, aprobarse una constitución catalana y celebrarse otro referéndum.

Por otro lado, el portavoz de ERC ha presentado una enmienda de su grupo a la proposición no de ley del PSOE que debate hoy el pleno y que reclama la nulidad de la sentencia de muerte contra el presidente de la Generalitat Lluis Companys dictada por el régimen franquista al término de la Guerra Civil.

ERC insiste en que la nulidad de las sentencias solo debe hacerse a través de una propia ley, y por tanto habría que reformar la Ley de Memoria Histórica para incluir la anulación.

No sirve, ha insistido, la declaración del Congreso, y por eso ha pedido al PSOE que admita su enmienda.