Embajadores europeos presentan sus cartas credenciales al gobierno en Trípoli

Los embajadores de la Unión Europea, Francia, Alemania, Holanda y el Reino Unido presentaron hoy en Trípoli sus cartas credenciales ante el Gobierno de unidad libio apoyado por la ONU, pese a que este aún no ha logrado la legitimidad del Parlamento internacionalmente reconocido con sede en Tobruk.

Bettina Muscheidt, Brigitte Curmi, Christian Buck, Eric Strating y Peter Millett forman parte del segundo grupo de embajadores que se acreditan ante el gabinete que preside Mohamad Fayaz al Serraj después de que el pasado 10 de noviembre lo hicieran sus colegas de Yemen, Canadá, Turquía y Austria.

Los diplomáticos presentaron sus requerimientos en el Palacio de Saraya al Hamra, un edificio histórico y simbólico elegido por sus lazos tanto con el Imperio Otomano como con el primer y único rey de Libia, Idris, derrocado por la revolución que en 1969 llevó al poder al coronel Muamar Al Gadafi, quien gobernó el país hasta que fue depuesto en 2011.

Pese a la ceremonia, no está previsto que ninguno de ellos se traslade a trabajar permanentemente en Trípoli y seguirán dirigieron sus misiones desde la vecina Túnez, como hacen la mayoría de países, explicaron fuentes locales

Libia es un Estado fallido, víctima del caos y la guerra civil, desde que hace cinco años la comunidad internacional apoyara el alzamiento rebelde en Bengasi y contribuyera militarmente a la caída de Al Gadafi.

Cinco años después, dos gobiernos, uno en Trípoli (oeste) y otro en Tobruk (este), luchan por hacerse con el poder y el control de los recursos petroleros con ayuda de decenas de milicias que cambian a menudo de bando.

De la situación se han beneficiado grupos yihadistas como la rama libia del Estado Islámico, Boko Haram o la organización de Al Qaeda en el Magreb Islámico, que han penetrado y extendido su influencia en el país.