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Expresidente y exdelegado en Melilla, en el banquillo por compra de votos

Expresidente y exdelegado en Melilla, en el banquillo por compra de votos

EFE

Melilla —

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Un tribunal de Melilla ha comenzado hoy a juzgar a una treintena de acusados, entre ellos un expresidente y un ex delegado del Gobierno en la ciudad autónoma, por presunta compra de votos por correo en las elecciones generales de 2008.

La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Málaga, con sede en Melilla, ha abierto el juicio oral que se prevé que dure unos nueve meses y en el que la fiscalía pide penas que suman 231 años de cárcel, otros 272 de inhabilitación y más de un millón de euros entre multas e indemnizaciones, por delitos electorales, de falsedad, asociación ilícita y prevaricación.

Entre los acusados se encuentra Mustafa Aberchan, que fue presidente durante un año entre 1999 y 2000 por Coalición por Melilla (CpM) y en la actualidad es el líder de la oposición en la Asamblea de la ciudad autónoma.

Otro de los acusados es Gregorio Escobar, que fue nombrado delegado del Gobierno en Melilla durante el Gobierno del PSOE en 2008, tras los comicios, y actualmente está apartado de la política.

Tras esta primera sesión, el juicio ha quedado aplazado hasta noviembre, al haber admitido el tribunal la renuncia al abogado, por pérdida de confianza, de uno de los acusados, Nordín Abdel.

El juez que preside el tribunal, Federico Morales, ha dado de plazo hasta mañana para que comunique el abogado que le sustituye, tras advertir de lo “sospechoso” de esta renuncia justo al inicio del juicio en un proceso que se remonta a hace nueve años.

El magistrado ha advertido de que no permitirá que “se dilate eternamente” un juicio para que el hay fijadas sesiones hasta julio de 2018.

El tribunal, tras aceptar parte de las demandas de las defensas, ha excluido el delito de malversación de caudales públicos y ha anulado parte de las principales pruebas, entre ellas los pinchazos telefónicos realizados durante la investigación de esta presunta trama para la compra de votos.

El caso se remonta a hace nueve años, cuando CpM y PSOE concurrieron juntos a las elecciones de 2008 y el PP, que gobierna en la ciudad, denunció una trama para comprar votos por correo a cambio de la inclusión en planes de empleo, que en Melilla dependen del Estado a través de la Delegación del Gobierno.

El PSOE de Melilla, en un comunicado, ha expresado su deseo de que el juicio “termine cuanto antes para que se conozca la verdad y quede patente la inocencia de todos nuestros compañeros”.

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