Fiscal general de EE.UU.: “La violencia no puede ser la respuesta”

La fiscal general de EEUU, Loretta Lynch, hizo hoy un llamamiento a la calma a los estadounidenses ante la muerte esta semana de dos ciudadanos negros a manos de policías blancos y la matanza de agentes ocurrida anoche en Dallas, en el estado sureño de Texas.

“La respuesta nunca debe ser la violencia, la respuesta debe ser la acción. Calmada, pacífica, cooperativa y determinada acción”, afirmó Lynch, la primera mujer de raza negra al frente de la Justicia de Estados Unidos, en una breve declaración en el Departamento de Justicia, tras la cual no admitió preguntas.

El Gobierno de EEUU hizo este llamamiento después de saber que el principal sospechoso de la matanza de Dallas, Micah Xavier Johnson, de 25 años y de raza negra, dijera que “quería matar a gente blanca, especialmente a agentes de policía blancos”, mientras se mantenía atrincherado en un estacionamiento asediado por la policía.

“Debemos acordarnos de que todos somos estadounidenses, no sólo compartimos una tierra común sino una vida en común”, dijo Lynch.

“A todos los estadounidenses les pido que no permitan que los acontecimientos de esta semana se conviertan en una nueva realidad en nuestro país”, añadió.

En su mensaje, la fiscal calificó de “inconmensurable tragedia” el ataque registrado anoche durante una protesta contra la violencia policial que se desarrollaba pacíficamente en el centro de Dallas y que ha dejado cinco agentes muertos y nueve personas heridas, incluidos siete policías.

El ataque se produjo cuando los manifestantes, al igual que ocurría en otras grandes ciudades del país, protestaban por los últimos incidentes de violencia policial con tintes racistas.

En concreto, la protesta se debía a la muerte de Alton Sterling, un hombre negro al que dos policías blancos dispararon el martes a quemarropa cuando lo tenían controlado en el suelo en Baton Rouge, en el estado sureño de (Luisiana), y del joven Philando Castile, muerto el miércoles en Falcon Heights, en Minesota, por disparos de un policía que le detuvo en su vehículo por una infracción de tráfico.

“Para aquellos que buscan mejorar nuestro país a través de la protesta pacífica, quiero que sepan que su voz es importante. No se desanimen por los que utilizan sus acciones legales como una coartada para su violencia atroz”, dijo Lynch a las personas que han participado en las manifestaciones, a las que prometió proteger.

La muerte de otros ciudadanos negros por disparos de policías blancos ha provocado el nacimiento de un nuevo movimiento civil a nivel nacional, llamado “Las vidas negras importan”, que reclama el fin de la violencia policial contra la comunidad negra.

Estados Unidos ha vivido repetidos episodios de tensión racial desde hace más de un año, especialmente tras la muerte en Ferguson, en el estado de Misuri, en agosto de 2014, del joven negro desarmado Michael Brown a manos de un agente blanco que luego fue exonerado de todos los cargos.