Francia prosigue la investigación sobre las motivaciones del atentado de Niza

Los investigadores franceses prosiguen hoy las investigaciones para tratar de determinar las motivaciones del atentado que el pasado jueves provocó al menos 84 muertos en Niza, obra de un ciudadano tunecino al que no se le conocían vínculos yihadistas.

Aunque el ataque no ha sido reivindicado por ningún grupo, las autoridades francesas consideran que el “modus operandi” responde al que preconizan organizaciones como el Estado Islámico (EI), que además tiene a Francia en el punto de mira de sus actos criminales.

Sin embargo, por el momento no ha aparecido ningún vínculo establecido entre ese grupo yihadista y el autor de la masacre, Mohamed Boulhel, que embistió con un camión a la multitud reunida en el paseo de los Ingleses para presenciar los fuegos artificiales del 14 de julio, fiesta nacional francesa.

Los investigadores tienen en su poder un teléfono móvil, que apareció en la cabina del camión en el que fue abatido, además de material informático requisado en su domicilio de un barrio del norte de Niza.

Esos elementos y otra documentación aprehendida por los agentes están siendo analizados para tratar de determinar el móvil de la masacre.

En paralelo, el país vive el primero de los tres días de luto oficial decretados por el presidente, François Hollande, tras el atentado, el segundo más sangriento que ha vivido Francia tras los del pasado 13 de noviembre en París y Saint Denis, cuando murieron 130 personas.

En aquel caso, el vínculo con el EI quedó establecido de forma clara, poco después de que este grupo lo reivindicara.

La ciudad de Niza recupera paulatinamente la normalidad, aunque se prevé que el paseo de los Ingleses permanezca cerrado, considerado el escenario de un crimen y, por tanto, sujeto al análisis de los investigadores.