G7 de Taormina celebra su última jornada centrada en inmigración y Exteriores

Los líderes del G7, reunidos en el municipio siciliano de Taormina, afrontan hoy su última jornada de reuniones con una agenda centrada en el control de la inmigración procedente de África y sus relaciones con otros países.

Esta segunda y última jornada comenzará a las 8:30 horas locales (6:30 GMT) con una ceremonia en el Hotel San Domenico de Taormina, donde han transcurrido los encuentros, para recibir a los mandatarios de cinco países africanos: Etiopía, Kenia, Níger, Nigeria y Túnez.

Han sido invitados el presidente keniano, Uhuru Kenyatta; el nigerino, Mahamadou Issoufou; el nigeriano, Muhammadu Buhari; el tunecino, Beji Caid Essebsi, y el primer ministro etíope, Hailemariam Desalegn.

La idea de celebrar la cumbre del G7 en Sicilia responde, entre otras cosas, al deseo de Italia de centrar el debate en el control de la inmigración, fenómeno que esta isla meridional registra con la llegada a sus puertos de cientos de personas rescatadas en el mar.

La reunión entre las siete democracias más industrializadas del planeta -Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido- y los representantes africanos se producirá desde las 9:15 hasta las 11:15 horas locales (7:15 y 9:15 GMT).

Tras una pausa para el almuerzo y una foto de familia entre todos ellos, el G7 en solitario retomará sus sesiones de trabajo desde las 11:45 hasta las 13:00 horas locales (9:45 y 11:00 GMT) con un encuentro sobre movilidad humana, igualdad de género y seguridad alimentaria.

Acto seguido dará inicio la tercera y última reunión de este G7, en la que se analizarán los asuntos relativos a las relaciones internacionales que mantiene este grupo.

Sobre la mesa estarán a buen seguro las relaciones con Rusia, que fue excluida de este selecto grupo tras la crisis ucraniana de 2014, pero también otros temas como las tensiones con Corea del Norte.

A las 15.00 horas locales (13.00 GMT) el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, que ejerce de anfitrión, ofrecerá una rueda de prensa en la que previsiblemente explicará el contenido de la declaración conjunta que asuman.

Un texto en el que no habrá compromisos en materia medioambiental al ser esta una política bajo examen por parte de la administración estadounidense de Donald Trump, tal y como se anunció en la jornada del viernes por parte del propio Gentiloni.

Le seguirán las ruedas de prensa individuales de cada líder.

De este modo se pondrá punto y final al G7 de Taormina, en el que ya ha sido aprobada una declaración contra el terrorismo centrada en combatir esta lacra, sobre todo en internet y como respuesta al atentado de la ciudad inglesa de Manchester del 22 de mayo.