Garzón quiere pasar página a la etapa de las “familias y los cupos” en IU

El coordinador de IU, Alberto Garzón, quiere poner en marcha un nuevo proyecto político “para la ruptura democrática y el socialismo” y que supere prácticas negativas de etapas anteriores como la existencia de “cupos o familias” o la falta de rendición de cuentas a la militancia.

Cree que Izquierda Unida “ha pecado”, entre otras cosas, de ejercer las “peores formas” de debate interno al permitir que las corrientes internas -una de las más críticas últimamente era la de Gaspar Llamazares- impusieran su criterio en base a su “posición de fuerza” y no a partir de discusiones ideológicas.

Por eso, Garzón, en el borrador de un documento al que ha tenido acceso EFE, el líder de IU afirma que ahora es el momento de iniciar “métodos nuevos” que den “voz y poder” a la militancia“.

Un documento que se discutirá el sábado en la Asamblea Político y Social (antiguo Consejo Político), a la que Garzón no podrá asistir porque sigue de baja médica.

Este nuevo proyecto que se pone sobre la mesa se armará sobre las ideas que están aportando las distintas secretarías ejecutivas de la organización y que también han sido reflejadas en este informe.

Con la idea de construir un nuevo movimiento que “vaya más allá” de los límites de la actual IU, insisten en que la “unidad popular” no es una consigna electoral ni tampoco la suma de determinadas fuerzas para concurrir a unos comicios sino una estrategia para avanzar por ese camino de “la ruptura democrática y el socialismo”.

A nivel interno, proponen, por ejemplo, profundizar en la economía participativa, reducir los órganos, buscar nuevas fuentes de financiación alternativa y mejorar el sistema de afiliación.

También IU tiene que acrecentar, según el documento, su comunicación exterior para que el mensaje sea conocido, dando más visibilidad a sus cargos públicos y mejorando la imagen general de la formación para hacerla “atractiva” a la clase trabajadora.

Y hace hincapié en este aspecto cuando IU, con sus ocho diputados en el Congreso dentro del grupo parlamentario de Podemos, corre el riesgo de quedar diluida en la marca morada.

Se suma a esto el hecho de que el partido de Pablo Iglesias dejó a Garzón sin la portavocía de Economía comprometida para darle la de Hacienda.

Otro de los frentes en los que IU pone el acento es en salir a la calle, estar al lado de las luchas sociales y políticas pero no solo para “acompañar” sino también para formar parte del “conflicto”.

Izquierda Unida, recalcan, debe salir de las “paredes” de los ayuntamientos y parlamentos y la militancia tiene que ser el “motor y primer organizador” del conflicto y generarlo “donde no exista de forma explícita”.