Gerardo Vera: “Landa era el iceberg de una generación de grandes”

El director del Centro Dramático Nacional (CDN), Gerardo Vera, ha destacado hoy que Alfredo Landa fue “el iceberg de una generación de grandes” que “cuando salían del encasillamiento del cine de consumo, dejaban con la boca abierta”.

Actores como Fernando Fernán Gómez, Pepe Bódalo, Agustín González, José Luis López Vázquez, “o como Alfredo -enumera Vera-, que hasta dio nombre a un género, el landismo. Pues estos señores cuando se ponían a las órdenes de un buen director te dejaban con la boca abierta”, considera el también escenógrafo.

“Eran de una modernidad apabullante, te dejaban sin respiración: tenían además un gran amor al trabajo y encima, talento”, resume.

La pantalla siempre ha reflejado la gran humanidad de Landa, con el que el director de cine y teatro tuvo una relación “no muy frecuente, pero sí muy intensa”.

“Le conocí cuando íbamos a hacer 'El Quijote', con Fernando Rey, de Manuel Gutiérrez Aragón, entonces tuvimos una relación muy cercana, mucha complicidad siempre, muchas risas”, recuerda Vera.

“Luego trabajé con él, yo como actor, en 'El rey del río'”, hace memoria Vera, y se ríe al recordar que Landa “siempre intentaba” poner a Vera de espaldas a la cámara: “era una coña que tenía siempre, que él tenía que estar siempre frente a cámara, era una cosa divertidísima”.

Entre sus últimos recuerdos juntos, Vera cuenta que le preparó una sorpresa en el homenaje que le prepararon en el Festival de Málaga, que le concedió en 2007 su Premio Especial Décimo Aniversario, al invitar a Paula Martel, la actriz que hizo con él “Ninet y un señor de Murcia”, que a Alfredo le hizo mucha ilusión.

Nada más verla, explica Vera, Landa gritó un: “Coño, Ninet”, muy de los mejores momentos del “landismo” que fue “muy emotivo”.

“Landa era un cinéfilo empedernido, iba mucho al cine Palafóx a la sesión de las cuatro con Maite, su mujer. La última vez que le vi salía del cine, y no le vi tan mal. No hablamos de la enfermedad ni nada, al revés, le vi con mucha vitalidad, con tanto ánimo...”, ha comentado Vera con pesar.

Para el director del CDN, la “humanidad de Alfredo era salvaje”.

“Él y José Sacristán empezaron de jovencitos haciendo papeles muy pequeños en la compañía de Isabelita Garcés, siempre pendientes de alguna sustitución. Y un día sucedió, desaparecieron dos actores y Sacristán y Landa subieron juntos al escenario. Me lo contó Julia Gutiérrez Caba, que era la protagonista y hacían una comedia de Miura: 'oye, estos chicos prometen', me dijo”, recuerda entre risas.

Vera quiso que Landa hiciera con él en 2009 “Luces de Bohemia” en el CDN, pero el actor, que ya estaba enfermo, “estuvo una tarde entera para, al final, decirme que no”.