Gobierno valenciano: repugnancia por atentados y convivencia frente al terror

El pleno del Consell, en una sesión extraordinaria presidida por el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha aprobado una declaración institucional en la que ha manifestado su “repugnancia y condena” de los atentados de París, en el que murieron al menos 127 personas, y ha pedido la paz.

El texto afirma que el Consell y todo el pueblo valenciano “lloramos por las personas muertas y desterramos el miedo que el terror quiere imponer, reafirmándonos en los principios democráticos y valores de convivencia que son nuestra fortaleza frente a la barbarie”.

Tras la reunión del pleno, el president del Gobierno valenciano ha comparecido en el Patio Gótico del Palau de la Generalitat para hacer público el manifiesto, junto a los miembros del Consell, el cónsul de Francia en Valencia, Pablo Broseta, el president de Les Corts, Enric Morera, el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, y el alcalde de Valencia, Joan Ribó.

El acto ha estado presidido por cuatro banderas: la de la Comunitat Valenciana, la española, la de la Unión Europea y la francesa, todas ellas con crespones negros en señal de duelo por las víctimas de los atentados perpetrados anoche en París, que han causado al menos 127 muertos y 180 heridos.

Tras compartir el luto por todas las personas asesinadas, la declaración, leída por la vicepresidenta Mónica Oltra, asegura que que los atentados de anoche “suponen un ataque contra la democracia en el corazón de uno de los países que más valores ha aportado a la creación y consolidación de los derechos humanos, así como a su universalización”.

El texto recalca que la democracia, la justicia, la paz, la igualdad y la libertad “son valores universales que se tienen que defender contra cualquier tentación totalitaria. La Generalitat Valenciana y el conjunto del pueblo valenciano están unidos al pueblo francés y a todos los pueblos del mundo que mantienen alta la bandera de las libertades”.

“El pueblo valenciano, que ha hecho de la libertad, la igualdad y la fraternidad valores imprescindibles de civilización, se pone al lado del pueblo francés para reafirmar aquellos principios y condenar cualquier violencia o terrorismo, que no son sino una muestra de cobardía y desprecio por parte de fanáticos que sólo tienen como objetivo socavar los fundamentos democráticos”, asegura finalmente el manifiesto.