González y Aznar unen su voz para exigir a Maduro liberar a presos políticos

Los expresidentes del Gobierno Felipe González y José María Aznar han unido hoy sus voces para exigir la liberación del opositor venezolano Leopoldo López y del resto de políticos encarcelados por el régimen de Nicolás Maduro.

Ambos han participado en un acto organizado por el despacho de abogados Cremades&Calvo Sotelo, que participa en la defensa de López, al cumplirse el sábado los tres años del encarcelamiento de este opositor.

El padre de Leopoldo López ha intervenido igualmente en este acto que ha contado con la presencia, entre otros, del presidente de Ciudadanos, Albert Rivera; el exministro Alberto Ruiz Gallardón; el ex secretario general de la OTAN y ex alto representante de la UE, Javier Solana; y los exalcaldes de Madrid Ana Botella y José María Álvarez del Manzano.

En raras ocasiones han coincidido en público defendiendo los mismos argumentos González y Aznar, por lo que los organizadores del acto y algunos de los invitados han destacado la relevancia de que los dos sumen fuerzas en favor de la liberación de López.

Ambos han accedido juntos a la sala en la que se han sucedido las intervenciones y se han aplaudido recíprocamente sus palabras en las que han instado a actuar a la comunidad internacional y a apoyar al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.

En concreto, han pedido respaldo a su petición del pasado mes de mayo en la que invocó la activación de la Carta Democrática a Venezuela por no respetar el orden constitucional, un proceso que puede llevar a la suspensión del país latinoamericano como miembro de esa organización.

Felipe Gonález, que ha formado parte del equipo internacional de juristas que defiende a López en Caracas, ha afirmado que el gobierno de Venezuela “no quiere el diálogo más que para humillar a la oposición y para mantener un régimen tiránico”.

Ha denunciado la permanencia de 110 presos por oponerse al régimen y ha considerado que, con presos políticos y de conciencia, “no hay democracia”.

“Hay más presos políticos que cuando comenzaron el diálogo”, ha lamentado antes de denunciar que el ejecutivo de Maduro los usa como “carne humana” para la negociación.

Asimismo, ha señalado que “no puede haber presos de conciencia en Venezuela y sentarse a hablar sin sonrojo con el gobierno”.

De la misma opinión es Aznar, quien ha calificado de “dictadura represiva” al gobierno de Venezuela y de “farsa” el diálogo con la oposición y ha expuesto que las autoridades del país permitieron ese diálogo “para garantizar la continuidad de Maduro y dividir a la oposición”.

El gobierno y la oposición venezolana iniciaron en octubre pasado un diálogo político bajo los auspicios del Vaticano y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en el que actuaron como mediadores el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y los expresidentes de Panamá y la República Dominicana, Martín Torrijos y Leonel Fernández, respectivamente.

Aznar ha hecho además un llamamiento a los gobiernos de los países de la OEA para denunciar la situación, así como a los países de la Unión Europea, que, ha dicho, “no pueden mirar para otro lado”.

Al mismo tiempo, ha destacado que el presidente estadounidense, Donald Trump, recibiera ayer en la Casa Blanca a la esposa de López, Lilian Tintori.

Leopoldo López padre ha sido el encargado de cerrar el acto con una intervención en la que ha pedido la libertad no sólo para su hijo, sino para todos los opositores presos.

También ha criticado el proceso de diálogo y ha pedido que se apoye a Almagro en su denuncia internacional de la situación en que vive Venezuela.

Al término del acto, González, en declaraciones a los periodistas y ante la acusación de ayer del líder de Podemos, Pablo Iglesias, de que él y Aznar echan “más gasolina al fuego” en relación con Venezuela, le ha instado a “dar la cara” para pedir a Maduro la liberación de todos los presos políticos.

Aznar ha preferido no hacer comentario alguno, mientras que Rivera ha calificado de “desafortunadas” las declaraciones de Iglesias.