El socio de Granados presenta una finca para cubrir su fianza y salir de prisión

David Marjaliza, socio del exconsejero madrileño Francisco Granados en la trama Púnica, ha presentado hoy una finca en Valdemoro (Madrid) para cubrir la fianza de 100.000 euros que le impuso la semana pasada el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco para poder salir de prisión.

Según han informado fuentes jurídicas, Marjaliza, que se encuentra en la cárcel desde hace catorce meses por el caso Púnica, ha depositado esta mañana la finca para pagar la fianza penal y ahora los peritos deberán tasarla para ver si cubre los 100.000 euros de caución.

Marjaliza ha acudido en persona al juzgado con un acta notarial que demuestra que el inmueble es de su propiedad y ahora el juez tiene que asignar un perito para que la tase.

Una vez el perito haya comprobado que su valor llega a los 100.000 euros, pedirá a la Fiscalía un informe sobre si apoya esa manera de pago de la fianza y luego decidirá acerca de si la acepta o no.

En caso de aceptar el pago mediante la finca, dictará su libertad y el inmueble quedará embargado, por lo que Marjaliza no saldrá de la cárcel hasta ese momento.

El juez le impuso esta fianza al considerar que el imputado ha colaborado con la investigación “admitiendo hechos” y “aportando evidencias”, después de que la Fiscalía Anticorrupción planteara dejarle en libertad bajo fianza de 250.000 euros.

Velasco entiende que Marjaliza ha colaborado de forma positiva con la investigación (el pasado verano declaró trece horas a petición propia) y se ha visto disminuido el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.

Según el auto del juez de fijación de fianza, Marjaliza “ha adoptado una dinámica de colaboración con la justicia, admitiendo hechos, aportando evidencias documentales incriminatorias y auxiliando al juzgado en la recuperación de activos de origen delictivo”.

“La investigación ha recibido, además, informaciones que han procedido de sus testaferros y colaboradores más inmediatos”, añade el juez en su resolución.

Dicha colaboración, según Velasco, “ha hecho disminuir los riesgos de alteración y destrucción de las fuentes de prueba”, y la imposición de la fianza se produce tras una “intensa” investigación sobre su participación en la trama Púnica de corrupción.

Así, destacaba que se ha llevado a cabo “una vigorosa actividad de recuperación de activos y ganancias de origen delictivo, tanto en sus propiedades en España como en Suiza”.

Marjaliza y Granados son los dos únicos imputados que permanecen en prisión por este caso desde octubre de 2014 y cuando el juez acepte la fianza de Marjaliza (que se encuentra en la prisión de Aranjuez), le impondrá como medidas cautelares la comparecencia quincenal, la retirada de pasaporte y la prohibición de salida del territorio.

Además deberá facilitar un teléfono y domicilio al juzgado y avisar de cualquier cambio.

A raíz de que Marjaliza, que desde su ingreso en prisión el 31 de octubre de 2014 no había querido declarar, hiciera una confesión de trece horas ante Velasco el pasado junio a petición propia a lo largo de dos días consecutivos, el juez ha estado intentando apuntalar con pruebas la veracidad de todas sus acusaciones en las que implicó a varios cargos políticos de diversos partidos.

De hecho, Velasco dedicó una de las doce piezas en las que despiezó el caso Púnica a Marjaliza, en la que mantiene bajo secreto esas trece horas de declaración en las que mencionó a varios cargos del PP, del PSOE y de Ciudadanos.

Tras levantar parcialmente el secreto de sumario el pasado junio y desvelar así el contenido de 40.000 folios y decenas de grabaciones de declaraciones, el juez mantiene bajo secreto otra vertiente del caso, la referida a las comisiones rogatorias pedidas a varios países.

En concreto, Velasco ha reclamado información de movimientos bancarios a seis países en tres continentes -Holanda, Costa Rica, Panamá, Suiza, Liechtenstein y Singapur- y todavía está pendiente de recibir algunas respuestas.

Desde septiembre, el juez ha estado tomando declaración a 40 personas, aproximadamente la mitad imputados y la otra mitad testigos, vinculadas todas ellas con municipios de la Comunidad de Madrid y la de Valencia, y relacionados con las últimas confesiones de Marjaliza.

En noviembre Velasco ordenó la detención de Ignacio Palacios, exjefe de gabinete y presunto testaferro de Francisco Granados, y de su mujer, y el registro de su domicilio en Madrid y de dos propiedades de Granados, una en Ávila y otra en Valdemoro.

El caso Púnica cuenta ya con más de un centenar de imputados, entre los que figuran los exconsejeros de la Comunidad de Madrid Salvador Victoria y Lucía Figar.