IU Extremadura propone un incremento de entre el 0,5 y el 2,5% de los tipos del IRPF para las rentas más altas

Una medida que permitiría “mantener la capacidad recaudatoria, que recae fundamentalmente sobre las rentas más altas”, según ha explicado el coordinador general de Izquierda Unida Extremadura, Pedro Escobar, en una rueda de prensa ofrecida en Mérida.

La segunda de las enmiendas se refiere al canon del agua, y propone una “bajada importante”, de manera que la cuota por contador y mes baje a un euro, y una cuota fija de 2,50 euros para usos domésticos en las viviendas situadas en los núcleos de población secundarios, lo que supondría un “aligeramiento en los impuestos indirectos”.

Escobar ha resaltado que la coalición defiende un marco de impuestos que se basa en “cargar más, o apretar más en los impuestos directos, que van a la riqueza, al patrimonio y la renta”, así como “descargar de los impuestos, que llegan de manera indiscriminada a todo el mundo”, en este caso el canon de agua.

“APRETAR” A LAS RENTAS MÁS ALTAS

Por otro lado, el coordinador general de Izquierda Unida Extremadura ha explicado “la propuesta que hace Monago es bajar ligeramente (entre un 0,25% y un 0,75%)” los tramos más bajos del IRPF, lo que tiene “un impacto individual de entre 40 y 60 euros” al año.

“Izquierda Unida no contempla esa modestísima bajada, no nos apuntamos a un sistema fiscal que al final recauda menos, la propuesta que hacemos es que a partir del tramo de 53.407 (euros brutos al año), un aumento de los tipos”, según ha explicado Escobar, que añade que oscilarían entre una subida del 0,5% y 2,5% de manera progresiva, un tipo de tarifa que según ha dicho ya existe en comunidades como Cataluña y Andalucía.

A su juicio, se consigue “mantener la capacidad recaudatoria”. “Por muy bonito que sea decir: vamos a bajar impuestos, eso no tiene nada que ver con las políticas de izquierdas, que pretenden redistribuir la riqueza y mantener los servicios”, ha dicho Escobar, que aboga por mantener la capacidad recaudatoria, que recae fundamentalmente sobre las rentas “más altas”.

“Extremadura, con la situación económica y social ofrece una imagen de que vamos de sobraos”, sobre todo, ha dicho, cuando en los próximos meses se va a debatir la nueva financiación, que va a ser “más dura para Extremadura”.

En los últimos tramos, las cantidades que tributarían se incrementarían, de manera que, por ejemplo, quienes pagaban un 24,5% (23.062), pasarían a pagar un 26% (37.145).

A su juicio, es necesario que se consolide un sistema fiscal “un poquito más justo y progresivo”, ante lo que añade que el gobierno extremeño tiene que “presionar” para que las becas que “quitó” el Ministerio de Educación “puedan seguir llegando a los estudiantes extremeños”, para que se “reabran” los Puntos de Atención Continuada, “para que se mantenga el transporte y los comedores escolares, para que se mantenga la tarjeta sanitaria a los inmigrantes y personas en situación irregular, para que los programas del copago hospitalario que se prevén se puedan afrontar con recursos propios”, ha dicho.