IU aclara que no ha echado a exdirigentes de Madrid sino que no se han reafiliado

El coordinador de Presidencia de IU, José Luis Centella, ha asegurado a Efe que Montserrat Muñoz, coportavoz de Izquierda Abierta, no ha sido expulsada y no tiene más que reafiliarse a la organización para recuperar su puesto en la dirección, como han hecho otros dirigentes que militaban en Madrid.

“No se ha echado a nadie”, ha recalcado Centella, ni a Muñoz ni tampoco a Esperanza Martínez, ambas de la corriente de Gaspar Llamazares, pero ellas deberán volver a solicitar el alta en IU si quieren volver, como ha hecho, por ejemplo, el responsable de Economía, José Antonio García Rubio.

Centella ha explicado que, después de que la dirección tomara la decisión de desvincularse legalmente de la federación madrileña para zanjar una crisis arrastrada por la desobediencia de la ejecutiva regional, se abrió un plazo de tres meses para que los 4.000 afiliados madrileños (todos los que estaban al corriente de pago) volvieran a afiliarse a IU.

Y además, se envió una carta a todos ellos para que tuvieran constancia de que, si no llevaban a cabo este trámite, quedarían fuera de la formación a partir de expirar ese plazo, que se cumplió el 14 de septiembre, un periodo en el que unas 2.000 personas han recuperado su carné de IU.

“Los que no lo han hecho, no tienen la ficha que acredita que pertenecen a IU y, por tanto, no pueden estar en sus órganos”, ha insistido Centella.

En el momento que lo hagan, recuperarán “automáticamente” los puestos que ocupaban, ha dicho Centella tras señalar que “otra cosa es el uso partidista que se le quiera dar a esta situación”.

Montserrat Muñoz, responsable de Política Institucional y Esperanza Martínez, de Justicia, ambas en Izquierda Abierta y miembros de la ya desaparecida federación madrileña, se encontraron el lunes con que no podían asistir a la reunión de la ejecutiva al no haber formalizado su pertenencia a IU.

Muñoz, al igual que todos los integrantes de Izquierda Abierta, se opuso a la decisión adoptada por el Consejo Político del 14 de julio de romper definitivamente con Madrid, en una resolución que apoyó el 70 por ciento.

Aunque votó en contra, está obligada a asumirla para poder continuar perteneciendo a IU, pero Muñoz cree que se trata de una expulsión ilegítima y con el objetivo de apartar de la dirección a todas las voces discrepantes, según ha contado estos días.

Gaspar Llamazares, a través de su cuenta de Twitter, ha advertido hoy de que Izquierda Abierta resistirá dentro de IU y que ellos no se van sino “que están siendo excluidos”.