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Implicado en Petrobras confiesa el pago de un soborno ante la sede del partido de Rousseff

La constructora brasileña OAS se acoge a ley de quiebras por el caso Petrobras

EFE

Río de Janeiro —

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El empresario Alberto Youssef, uno de los principales implicados en las corruptelas en la petrolera estatal brasileña Petrobras, confesó hoy que ordenó el pago de un soborno al tesorero del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), Joao Vaccari Neto, frente a la sede de esa formación.

En un testimonio que presentó hoy ante la justicia y cuya grabación fue divulgada por la Fiscalía, Youssef dijo haberle entregado 800.000 reales (unos 250.000 dólares) en efectivo a Vaccari Neto, como parte de los recursos desviados de Petrobras.

El empresario, que ha confesado que distribuía parte del dinero desviado, dijo que mitad de los recursos destinados al PT la entregó un emisario suyo en Sao Paulo frente a la sede de ese partido, al que pertenecen la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva.

Youssef, dueño de casas de cambio, es uno de los implicados en el escándalo que colabora con las investigaciones a cambio de una futura reducción de pena.

Según el empresario, el dinero fue entregado por un empleado suyo, que identificó como Rafael Angulo, a un representante de la multinacional Toshiba -una de las empresas implicadas-, que lo entregaría después a Vaccari Neto.

El empresario dijo que el dinero fue entregado a la formación oficialista por orden de Toshiba y como parte de los sobornos que las empresas implicadas pagaban para distribuirse los contratos con la petrolera estatal.

Youssef dijo que los otros 400.000 reales (125.000 dólares), también en efectivo e igualmente por petición de Toshiba, se los entregó personalmente a una cuñada de Vaccari Neto.

“El valor fue retirado en mi oficina (en Sao Paulo) por su cuñada (Marice Correa de Lima). La otra mitad fue entregada en la puerta de la dirección nacional del PT por mi empleado Rafael Angulo a un representante de Toshiba para que él se lo pudiese entregar a Vaccari”, afirmó el delator.

El tesorero del PT, en un comunicado, negó “vehementemente que haya recibido cualquier cuantía de dinero de manos del señor Alberto Youssef o de sus representantes” y agregó que todas las donaciones de empresas a esa formación son realizadas dentro de la ley.

El dirigente del partido oficialista ya responde como reo en un proceso por asociación para delinquir, lavado de dinero y corrupción pasiva por supuestamente haber recibido recursos desviados de Petrobras.

La dirección del partido en el Gobierno divulgó la víspera un manifiesto en el que anunció que expulsará de sus filas a los militantes que sean condenados por corrupción, como una de las iniciativas para reaccionar a los ataques que alega sufrir.

Uno de los principales líderes de la formación, el exministro de Justicia y exgobernador del estado de Río Grande do Sul Tarso Genro se dijo el lunes partidario de que Vaccari sea separado preventivamente del cargo mientras responde ante la justicia.

El escándalo en el seno de Petrobras comenzó a ser investigado en marzo del año pasado cuando fue identificada una red que amañaba los contratos de la mayor empresa de Brasil con numerosas constructoras; elevaba artificialmente el valor de los mismos y distribuía la diferencia en sobornos pagados a altos funcionarios de la estatal y a decenas de políticos que facilitaban los negocios ilegales.

Según las investigaciones, las corruptelas se repitieron durante más de diez años, pudieron iniciarse en la década de 1990 y desviaron una cantidad no precisada de miles de millones de dólares.

A lo largo de las investigaciones, han sido arrestados cinco ex altos cargos de la empresa y una decena de ejecutivos de importantes constructoras.

Algunos de los detenidos aceptaron acuerdos de colaboración con la justicia a cambio de una futura reducción de penas y denunciaron a unos 50 políticos que habrían permitido las ilegalidades, entre ellos los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado.

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