Informe revela el “preocupante” incremento de actividad del ELN en Colombia

La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha incrementado sus acciones armadas en Colombia de una manera que preocupa por el efecto que pueden tener en el proceso de paz, advirtió un informe presentado hoy en Bogotá.

El ELN ejecutó en 2014 un total de 386 acciones en el país, lo que supone un aumento del 10,6 % en comparación con 2013, cuando cometió 349 ataques de diferente tipo, según el estudio “Lo que hemos ganado”, un análisis sobre el estado del conflicto armado colombiano en 2014 hecho por la Fundación Paz y Reconciliación.

Ese documento muestra que mientras las acciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se redujeron un 40 % el año pasado como consecuencia de las negociaciones de paz, han aumentado las del ELN, segunda guerrilla del país, que está en diálogos “exploratorios” con el Gobierno para intentar un proceso similar.

“Está creciendo la operatividad del ELN, lo cual es una preocupación para la paz”, dijo a periodistas el director de la Fundación Paz y Reconciliación, León Valencia, analista político que en su juventud formó parte de ese grupo guerrillero.

Valencia explicó que el ELN “ha retornado a territorios que había abandonado” por la presión militar o de otros grupos armados, como zonas de los departamentos de Caldas, Boyacá y Huila, o la región del Bajo Cauca en Antioquia, y también ha aumentado su actividad en partes del país donde su presencia era reducida, como el departamento del Chocó.

Según el estudio, elaborado con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y el Centro Internacional de Toledo para la Paz (CITpax), el ELN opera en 89 municipios de siete regiones colombianas.

El informe señala además que el ELN ha mejorado su situación financiera producto del control que ejerce en zonas de frontera con Venezuela de actividades como el contrabando de gasolina, “la extorsión a las empresas extractivas y los ganaderos del departamento” de Arauca, su principal bastión.

“El ELN tiene plata y la guerra se hace con plata”, explicó el analista.

Según Valencia, es necesario “acelerar” la mesa pública de negociación con esa guerrilla, tarea que “le corresponde al Gobierno pero también al ELN” para que los esfuerzos de paz que se están haciendo con las FARC no se ven perjudicados por el crecimiento del ELN.

“La tentación de seguir en la guerra puede costarle muy caro al ELN también y a las comunidades donde ellos están”, agregó en la presentación del informe, en el que dijo que esa guerrilla “está perdiendo una oportunidad inmensa” de avanzar hacia un diálogo de paz.

Valencia recordó que los diálogos “exploratorios” con el Gobierno “llevan mucho tiempo” porque “empezaron en enero de 2014 y estamos ya a febrero de 2015”, es decir, trece meses, mientras que la etapa preparatoria de la negociación con las FARC duró seis meses.

Asimismo, subrayó que, en caso de que el Gobierno y las FARC lleguen a un acuerdo definitivo, toda la presión de la Fuerza Pública va a recaer sobre el ELN.