Instituciones Penitenciarias justifica el tercer grado a Matas por su “conducta ejemplar”
El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, ha defendido este jueves la concesión del tercer grado penitenciario al exministro del PP Jaume Matas alegando que no ha habido ningún trato de favor y que la medida “no constituye ningún beneficio penitenciario ni privilegio gracioso”. Simplemente, ha dicho, se le ha aplicado la ley como a cualquier otro recluso.
Yuste ha comparecido en la Comisión de Interior del Congreso “a petición propia” y de varios grupos de la oposición tras el escándalo que ha causado la puesta en semilibertad de Matas en contra de la Junta de Tratamiento del Centro Penitenciario de Segovia, de donde salió el pasado mes de octubre tras cumplir tan sólo dos meses de condena.
En su primera intervención, el secretario general de Instituciones Penitenciarias se ha limitado a leer los informes de su departamento basados en los argumentos puramente jurídicos de la medida. Según ha sostenido, en la decisión de aplicar el tercer grado a Matas se han tenido en cuenta varios factores. Como el “comportamiento ejemplar” demostrado por el recluso; que es una persona “totalmente insertada en la sociedad”; cuenta con un trabajo “estable” como consultor y con suficientes “contactos sociales” para poder desarrollarlo, y con “apoyo familiar”.
Además, Yuste ha afirmado que los responsables de la medida deducen también que, al no ostentar ya cargos públicos, “no dispone de influencias necesarias que podrían favorecer su reincidencia” en otros hechos delictivos.
Sus argumentos han indignado a los portavoces de la oposición, que los han considerado una “tomadura de pelo” por diferenciar y beneficiar a los “delincuentes de cuello blanco” mientras se castiga con toda la dureza a los “roba-gallinas”. Todos han coincidido en que el excarcelamiento de Matas es una decisión puramente política y no “jurídica”, que pone en entredicho el discurso del PP de “regeneración política” y lucha contra la corrupción.
El diputado del PSOE Pablo Martín ha incidido en que se trata más de un “indulto encubierto”, lo que ha rechazado después Yuste. Martín también ha criticado que las “relaciones y contactos sociales” que corrompieron a Matas hayan servido ahora como argumento para concederle el tercer grado.
El portavoz de la Izquierda Plural, Ricardo Sixto, ha calificado de “excusas de mal pagador” las justificaciones del responsable de Prisiones y ha asegurado que tal medida ha creado “alarma social”. “La excarcelación de Matas sólo es comprensible por ser Matas uno de los suyos, uno del PP”, ha sostenido Sixto, que ha recordado la nula colaboración del exministro con la justicia y los muchos otros juicios que tiene pendientes.
Toni Cantó, portavoz de UPyD, que intervino reconociendo que estaba “un poquito cabreado”, ha recordado a Yuste que Matas “está imputado por tal rosario de cosas que lo que nos viene usted a plantear aquí es absolutamente vergonzoso”. Cantó ha sentenciado que lo que “ha perpetrado” Instituciones Penitenciarias es puro “trilerismo argumental”.
Varios portavoces criticaron también que Matas no haya devuelto el dinero del que se apropió indebidamente, pero Yuste ha recordado que el delito por el que ha sido condenado “no tiene responsabilidad civil”.
El portavoz del PNV, Emilio Olabarría, ha resaltado que es “poco edificante” el caso de esta excarcelación. “No nos riamos de la ciudadanía”, ha pedido el diputado peneuvista, que ha ironizando con el hecho de que Matas vaya a poder mantenerse económicamente fuera de la prisión gracias a los trabajos de “consultoría”. “Consultaría? Sí, pero siempre en beneficio propio”, ha espetado Olabarría.
Incluso el portavoz de CiU, Feliu Joan Guillaumes, que ha reconocido que tenía previsto hacer una “intervención moderada”, le ha dicho luego a Yuste: “Me lo ha puesto usted muy mal”.
La diputada del PP, Ana Belén Vázquez, fue la única que salió en defensa de la decisión de Instituciones Penitenciarias, argumentando que se ha aplicado “estrictamente la ley” y negando que haya habido cualquier favoritismo con Matas. La popular ha sacado a relucir casos similares en época del PSOE –como la excarcelación de Rafael Vera–, a cuyos diputados ha acusado de “querer poner en entredicho toda la legislación penitenciaria” y de “sembrar la duda, con mala fe, sobre el sistema”.
