Insulza asegura que el caso Ayotzinapa provocó una “indignación especial”

La desaparición de 43 estudiantes de la escuela para maestros de Ayotzinapa el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, estado mexicano de Guerrero, provocó “una indignación especial”, dijo hoy el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza.

“Ayotzinapa provocó, por así decirlo, una indignación especial por la cantidad de personas de que se trataba, por la forma que fue cometido el crimen, por la actuación de funcionarios locales”, dijo el diplomático chileno a la prensa.

Tras la presentación de su libro “Estrategias y procesos de política exterior en Estados Unidos 1981-1991” en la capital mexicana, Insulza señaló que “todo eso provocó una alarma especial”.

Con todo, consideró que “en general no existe una opinión negativa respecto de la forma en que se ha llevado el tema” y dijo tener la esperanza de que finalmente haya “claridad sobre el asunto y se concluya la investigación”.

Recordó que la OEA tiene a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que es la que habla en su nombre en esa materia. “No soy yo el llamado a hacerlo, ni voy a pronunciarme”, dijo.

“La CIDH ha concretado un acuerdo con el Gobierno de México y en estos días han instalando un conjunto de expertos para examinar la forma en que se han llevado a cabo estos procedimientos, para entregar un informe y una asesoría al Gobierno mexicano”, apuntó.

Indicó que la OEA va a esperar los resultados y no hará en este momento “una denuncia más”.

Un Comité de la ONU divulgó el viernes sus conclusiones sobre el reciente examen a México, en las que dijo que las desapariciones forzadas en este país son generalizadas y la mayoría de ellas quedan impunes.

“El grave caso de los 43 estudiantes sometidos a desaparición forzada en septiembre de 2014 en el estado de Guerrero ilustra los graves desafíos que enfrenta México en materia de prevención, investigación y sanción de las desapariciones forzadas y búsqueda de las personas desaparecidas”, anotó.

Por otro lado, Insulza señaló que México no ha perdido su papel como promotor de paz. “No creo que eso haya ocurrido; lo que sucede es que las guerras que había 30 años atrás (en la región) no están ocurriendo, salvo en el caso y el único que queda es el de Colombia”, expuso.

“Entonces, ese México promotor de la paz actuaba en un escenario latinoamericano muy distinto y mucho más negativo que el de ahora”, añadió.

Sobre el problema del narcotráfico dijo que “afecta en conjunto a la región” y recordó que la OEA emitió un informe en que indicó que es “necesario enfrentar la oferta y también la demanda de droga”.

El informe sostiene también que todos los países tienen que proponer medidas alternativas para evitar que la cárceles estén llenas de pequeños infractores, y “concentrar la acción del Estado en los criminales mayores”.