Investigan a un conseller por malversación cuando era alcalde de Figueres

La Fiscalía de Girona investiga al conseller Santi Vila y a la alcaldesa de Figueres, Marta Felip, por un presunto caso de malversación pública cuando el primero era alcalde de este municipio de Girona, extremo que niega el titular de Territorio, quien ha defendido que su actuación se ajustó a derecho.

La investigación parte de un escrito de la Oficina Antifraude a raíz de una denuncia de la regidora y actual portavoz del PP en el Ayuntamiento de Figueres, María Àngels Olmedo, por presuntas actuaciones irregulares del consistorio durante las etapas de alcalde de ambos que podrían haber beneficiado a un empresario.

Según la denuncia, el ayuntamiento de Figueres, alquiló unos locales propiedad de una empresa que nunca se llegaron a destinar al servicio municipal de Bienestar Social, tal y como estipulaba el contrato.

Según Antifraude, que inició su investigación a raíz de una denuncia, el consistorio pagó a la empresa Nova Cadieisa, cuyo apoderado es el empresario Amadeu Miquel, un total de 160.000 euros por el alquiler de estos locales entre el 1 de octubre de 2010 y el 22 de febrero de 2013.

Se da la circunstancia, además, según esta Oficina, de que el ayuntamiento realizó obras de adecuación de los locales valoradas en ceca de 1,4 millones de euros.

Antifraude achaca a la “desidia o la incuria” de los responsables municipales el hecho de que el Ayuntamiento de Figueres y Nova Cadieisa mantuvieran vigente el contrato de alquiler durante tanto tiempo, pese a que los locales, aún después de la remodelación, nunca se llegaron a ocupar.

Tras analizar la documentación aportada por la Oficina Antifraude, la Fiscalía Provincial de Girona ha decidido incoar diligencias de investigación por si de estas actuaciones pudieran ser constitutivas de un uso irregular de fondos públicos por parte del consistorio de Figueres y un trato de favor hacia el empresario.

Estos hechos se produjeron en el mandato como alcalde de Santi Vila y de su sucesora, la actual alcaldesa, Marta Felip.

En un acto en Barcelona, Santi Vila ha asegurado hoy que la denuncia “forma parte del pim pam pum político” y que “no tiene nada que ver con los aspectos que deben proteger la justicia.”

En este sentido, ha afirmado que las acciones que se hicieron entonces desde el consistorio de Figueres fueron “ajustadas al derecho y con el máximo rigor administrativo”.

El conseller, además, se ha mostrado convencido de que la Fiscalía “dedicará muy pocos minutos en atender esta denuncia”, porque “caerá por su propio peso”.