Isabel Allende quiere liderar al socialismo chileno e imponer un nuevo estilo

La presidenta del Senado chileno, Isabel Allende, busca establecer un nuevo estilo de conducción en el Partido Socialista (PS) chileno, si se impone en las elecciones internas programadas para abril del próximo año.

Allende formalizó esta semana su postulación a dirigir uno de los principales colectividades del bloque de centroizquierda, Nueva Mayoría, que actualmente gobierna el país y que abarca desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista.

“Tengo un estilo distinto, muy cercano con la presidenta (Michelle Bachelet) y sus desafíos, pero también al interior de la Nueva Mayoría, con mucho respeto a la diversidad”, dijo en una entrevista publicada hoy por el diario La Tercera.

La hija del fallecido presidente Salvador Allende y primera mujer en presidir en Senado, reconoció que en su aspiración por conducir al PS, también hay una motivación del género.

“Hay un tema de género que no es menor. Llevo harto tiempo diciendo que las mujeres estamos subrepresentadas”, afirmó.

“Nunca ha habido una mujer presidenta (en el PS). Es un hito”, agregó.

Recordó que fue la segunda mujer en presidir la Cámara de Diputados, la primera titular del Senado y que está “dispuesta a ser la primera presidente del PS”.

Allende se enfrentará en las elecciones internas de su partido al poderoso exsenador Camilo Escalona, quien se postula por quinta vez al cargo.

La senadora descartó que si llega a liderar el PS ello pueda afectar una eventual campaña para la presidencia del país, cargo para el cual ha figurado como potencial carta en las últimas encuestas de opinión.

“Yo no estoy en campaña presidencial y nadie me ha visto ansiosa ni detrás de las encuestas ni autoproclamándome”, afirmó.

Pero reconoció que “las presidencias de los partidos puede ayudar a potenciar los liderazgos o pueden ser exactamente lo contrario”.

Allende dijo que de triunfar en su postulación en el PS se mantendría en el cargo por los dos años que dura el período e insistió en que ello no sería un obstáculo para una eventual carrera por la presidencia en 2017.

“Eso significa que terminaríamos en abril de 2017. Las elecciones presidenciales son en noviembre (...) Ese es mucho tiempo”, sostuvo.

“En política tres años es toda una vida. Nadie sabe lo que puede pasar”, aseguró.

Y para reafirmar que su interés primordial actualmente es ganar la conducción del PS, señaló: “Si uno postula a la presidencia de un partido es porque tiene absoluta conciencia de la responsabilidad que eso implica, tal como tengo conciencia que hoy soy y seguiré siendo presidenta del Senado hasta el 11 de marzo”.