Maza renueva esta semana la cúpula fiscal en pleno debate sobre su autonomía

El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, renueva esta semana la jefatura de las principales Fiscalías, como la de la Audiencia Nacional y la de Anticorrupción, en pleno debate sobre posibles injerencias políticas en su rechazo a acusar al presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, en el caso Púnica.

El Consejo Fiscal, órgano consultivo del fiscal general, se reúne el miércoles para pronunciarse sobre las candidaturas presentadas para cubrir 35 plazas que quedan vacantes en la cúpula fiscal una vez cumplidos los cinco años de mandato. La elección en último término compete a Maza y afecta a la dirección de Fiscalías clave.

Como la de la Audiencia Nacional, cuyo actual jefe, Javier Zaragoza, que lleva diez años al frente, disputa su permanencia con otros dos candidatos: su teniente fiscal, Jesús Alonso, y el fiscal superior de Madrid, Jesús Caballero Klink.

También a Anticorrupción, que tras la jubilación en noviembre de su responsable los últimos trece años, Antonio Salinas, hay siete aspirantes al cargo.

Seis de ellos fiscales adscritos a esa Fiscalía Especial y que investigan casos como Bankia, Pujol, Púnica y Bárcenas. El séptimo es un fiscal del Supremo, Manuel Moix, que precedió a Caballero Klink en la jefatura de la Fiscalía de Madrid.

Dos de esas aspirantes han sido además protagonistas de las discrepancias en el caso Púnica: la actual teniente fiscal Belén Suárez, autora del informe al juez Eloy Velasco oponiéndose a acusar a Pedro Antonio Sánchez, y Teresa Gálvez, una de las fiscales del caso que sí era partidaria de la acusación.

La decisión final la suscribió Suárez -la mayor autoridad en Anticorrupción tras la jubilación de Salinas- y lo hizo de acuerdo con el criterio marcado por el fiscal general del Estado, quien ha afirmado que no recibió ningún tipo de presión política al respecto y que actuó de acuerdo con el planteamiento de la Secretaría Técnica y los fiscales de la Sala de lo Penal del Supremo.

Además de ellas dos, otros cuatro fiscales anticorrupción tratan de alcanzar la cúpula de esa Fiscalía, como el fiscal de Bankia y de las “tarjetas black” de Caja Madrid, Alejandro Luzón, que además es teniente fiscal de la Secretaría Técnica, o Antonio Romeral, que lleva “los papeles de Bárcenas”.

Los otros dos son Carlos Alba, ex teniente fiscal de Ciudad Real, y José Miguel Alonso, que llevó a juicio a Ramoncín por el caso SGAE.

El requisito para ser candidato a la plaza de fiscal jefe Anticorrupción es llevar más de veinte años en la carrera fiscal y, en este caso, los más antiguos son Suárez, Gálvez y Moix, aunque no por ello tienen en teoría más opciones para ser elegidos.

El proceso de nombramientos en la cúpula fiscal afecta también a Antidroga, donde toca renovar a José Ramón Noreña; Seguridad Vial, dirigida por Bartolomé Vargas; Extranjería, con Joaquín Sánchez-Covisa al frente, o Medio Ambiente, con Antonio Vercher.

Asimismo, procede renovar o relevar a las fiscales de Cooperación Penal Internacional, Rosa Ana Morán, y de Criminalidad Informática, Elvira Tejada.

En el Supremo también toca renovar a Juan Ignacio Campos, fiscal Sala jefe de lo Penal, a la fiscal de Sala Pilar Barrero y al fiscal jefe de la Unidad de Apoyo José Luis Bueren.

También en las Fiscalías superiores de las comunidades autónomas quedan pendientes decisiones como el relevo o mantenimiento de Juan Ramón Calparsoro en la del País Vasco y de Jesús María García Calderón en la de Andalucía, o las renovaciones de los fiscales superiores de Castilla-La Mancha, Murcia o La Rioja.

Asimismo, es momento de decidir sobre las fiscalías provinciales de Girona, Cádiz, Almería, Zamora, Lleida, Tarragona, Zaragoza o Álava.