Un etarra acogido a la vía Nanclares, y en libertad, beneficiado por la doctrina Parot

La Audiencia Nacional ha declarado hoy extinguidas las responsabilidades penales del etarra arrepentido José Manuel Fernández Pérez de Nanclares, en libertad condicional desde el 7 de mayo de 2012 tras acogerse a la denominada “vía Nanclares”, al anularle en su expediente la aplicación de la doctrina Parot.

La sección primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que preside Fernando Grande-Marlaska, ha adoptado esta decisión tras revisar la fecha del licenciamiento definitivo de Fernández Pérez de Nanclares a la luz de la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que anuló la doctrina Parot, han informado hoy fuentes jurídicas.

Se trata por tanto del segundo miembro de ETA acogido a la llamada “vía Nanclares” que se ve beneficiado por la sentencia del Tribunal de Estrasburgo en el caso de Inés del Río, ya que la pasada semana el pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acordó la excarcelación de otro etarra arrepentido, Antonio Alza.

El 7 de mayo de 2012, el juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro, dejó en libertad condicional a Fernández Pérez de Nanclares, que se encontraba clasificado en tercer grado penitenciario desde el mes de febrero.

Pérez de Nanclares fue expulsado de ETA tras reconocer que sus objetivos se pueden lograr por vías políticas y no mediante la lucha armada y como muestra de su arrepentimiento fue abonando periódicamente la responsabilidad civil, quedándole pendiente cuando fue puesto en libertad el pago de 2.624,63 euros, e incluso aportó una finca suya para hacer frente.

Cuando le fue concedida la libertad condicional había cumplido las tres cuartas partes de su condena y había manifestado por escrito su renuncia a la violencia reconociendo el daño causado y pidiendo perdón a las víctimas.