La ONU intenta reabrir el diálogo suspendido entre las dos comunidades de Chipre

El enviado especial de la ONU para Chipre, Espen Barth Eide, se reunió hoy con el presidente del país, Nikos Anastasiadis, para tratar de crear un clima favorable que posibilite la reanudación de las negociaciones de paz entre las comunidades greco y turcochipriota, suspendidas en octubre.

El diálogo entre ambas comunidades se paralizó el pasado 20 de octubre por decisión de Anastasiadis, después de que Turquía -que mantiene el norte de la isla bajo control militar desde 1974- enviase un barco para realizar exploraciones sísmicas en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Chipre, que aún hoy permanece en las aguas territoriales de la isla.

En el encuentro de hoy en Nicosia, Eide aseguró que existe la opinión compartida de que se debe hacer algo “para crear las condiciones que permitan una rápida vuelta a las negociaciones”.

“Mi mandato es el de asistir a las dos partes en las negociaciones”, aclaró el representante de la ONU, que explicó también que no es técnicamente posible obligar los dos bandos a comunicarse.

Por su parte, el Gobierno chipriota se niega a volver a la mesa de diálogo hasta que cese la violación de las aguas de su ZEE.

“No puede tener lugar un diálogo bajo amenazas e intimidaciones”, dijo el portavoz del Ejecutivo, Nikos Jristodulidis, al término de la reunión entre Eiden y Anastasiadis.

Asimismo, el portavoz agregó que tan solo cuando Turquía “muestre su respeto hacia los derechos soberanos de Chipre el diálogo podrá reanudarse”.

Eide subrayó que ahora está “trabajando activamente” para asegurarse de que cuando se reanuden las conversaciones “podamos tener un rápido progreso”.

El Gobierno chipriota considera esta operación de Turquía como la más grave desde 1983, año en que proclamó de forma unilateral la República Turca del Norte de Chipre (RTNC), reconocida sólo por Ankara.

Por ello, el mes pasado anunció una serie de medidas contra el Gobierno turco, entre ellas, el bloqueo del proceso de adhesión de este país a la Unión Europea (UE).

El descubrimiento de reservas estimadas en cinco billones de pies cúbicos de gas en aguas de Chipre en 2011 ya desencadenó en su momento reacciones de Turquía, que exige que la explotación de los recursos cuente con la participación de los turcochipriotas.

Nicosia, por su parte, ha dejado repetidamente claro que las riquezas naturales del país, incluidos los recursos energéticos, serán compartidas con los turcochipriotas tras una solución integral del problema de Chipre y no antes.

Eide tiene previsto reunirse mañana con el líder turcochipriota, Dervis Eroglu.