La ONU votará la incorporación de nuevos miembros al Consejo de Seguridad

La Asamblea General de la ONU votará este viernes la incorporación de cinco nuevos miembros del Consejo de Seguridad, lo que permitirá a Perú regresar a ese órgano de Naciones Unidas por quinta ocasión desde su creación.

El Consejo de Seguridad, el principal órgano de decisiones de la ONU, tiene cinco miembros permanentes (Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido y Francia) y otros diez no permanentes que representan a las distintas regiones, con un mandato de dos años.

A no ser haya algún tropiezo a última hora, Perú, que hace campaña para regresar al Consejo desde 2008, se reincorporará a ese órgano a partir del 1 de enero de 2018, en reemplazo de Uruguay.

Perú accede al Consejo de Seguridad representando a Latinoamérica y el Caribe, que en los últimos años ha venido eligiendo a un representante de esa región sin que haya habido contratiempos en la mayoría de las ocasiones.

Si al final su candidatura es votada por la Asamblea General, con al menos los dos tercios de los sufragios de los 193 representantes, Perú se sumará al Consejo junto con Bolivia, actual miembro no permanente y que dejará su silla a fines de 2018.

Esa nación andina será uno de los dos países hispanohablantes que se incorporará al Consejo de Seguridad, ya que también accederá Guinea Ecuatorial, representando a su respectivo grupo regional y que reemplazará a Egipto.

Este año no se espera que tampoco haya competencia en la elección de los otros tres países que se incorporarán al consejo desde el 1 de enero próximo, ya que han sido designados en los diferentes procesos de selección regional.

Así, Costa de Marfil entrará representando al grupo africano, en reemplazo de Senegal; Kuwait sustituirá a Japón después de haber sido seleccionado en el área Asia-Pacífico, y Polonia tomará la silla que deja vacante Ucrania, en el grupo de Europa Oriental.

Habrá, también este año, una sexta votación extraordinaria con el fin de ratificar un pacto adoptado el año pasado entre Italia y los Países Bajos para que ambos países se repartieran los dos años de presencia en el Consejo de Seguridad.

Perú ha tenido un asiento en el Consejo de Seguridad en cuatro ocasiones anteriores, la última para el período 2006-2007 y, si finalmente se confirma su incorporación, defenderá unos principios que vienen determinando sus acciones en Naciones Unidas.

La búsqueda de una paz sostenible, el fomento del multilateralismo y el desafío de las nuevas amenazas a la paz y la seguridad internacional son algunas de las preocupaciones que ha venido dejando claro Perú en su papel en Naciones Unidas.

“Vivimos en distintas partes del mundo crisis de confianza, graves retrocesos en la globalización, tentaciones populistas y proteccionistas y una ola de refugiados casi sin precedentes”, afirmó el presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, cuando se estrenó en la ONU en septiembre del año pasado.

Perú es el quinto país del continente en cuanto al número de efectivos que aporta a los “cascos azules”. Participa en las misiones de República Centroafricana y en la República del Congo, entre otras, y hasta hace poco estaba también presente en Haití.

El Gobierno de Lima ha venido defendiendo una mayor eficacia en las operaciones de paz de Naciones Unidas con mandatos y plazos más precisos, mejor adaptación a las realidades de cada escenario y una adecuada financiación.

En las siete décadas de vida de Naciones Unidas, Perú ha aportado unos 8.000 efectivos a las distintas operaciones de paz de la ONU.