La OTAN confía en que Pakistán seguirá garantizando el tránsito a sus tropas

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, confió hoy en que las autoridades de Pakistán garantizarán el tránsito de las fuerzas aliadas por su territorio pese a las tensiones creadas por los últimos ataques con “drones” de Estados Unidos.

“Confío en que las autoridades paquistaníes harán todo lo que puedan para asegurar el tránsito a través de Pakistán, porque al fin y al cabo también interesa a Pakistán”, señaló Rasmussen en una conferencia de prensa.

El político danés se refirió así a la reacción que ha provocado la reciente muerte del líder del mayor grupo talibán de Pakistán, Hakimulá Mehsud, en un bombardeo estadounidense en pleno comienzo del proceso de paz con los insurgentes en el país.

Rasmussen, que no quiso hablar directamente de la muerte de Mehsud, subrayó que el terrorismo “sigue constituyendo una amenaza para toda la región” y aseguró que la Alianza Atlántica y el Gobierno paquistaní están unidos para combatirlo.

Además, recordó que la seguridad de Pakistán y Afganistán está vinculada y que ninguno de los dos países podrá ser seguro sin que lo sea el otro.

Tanto el Gobierno de Kabul como el de Islamabad tratan de entablar negociaciones con los talibanes asentados en su territorio.

El Gobierno afgano ha acusado en repetidas ocasiones al aparato de seguridad paquistaní de dar cobijo en su territorio e incluso apoyar a facciones talibanes y a otros grupos que lanzan ataques en Afganistán y que son objetivo habitual de los “drones” estadounidenses.

La posibilidad de que Pakistán cierre las rutas de tránsito de la OTAN en respuesta a los últimos ataques de EEUU en su territorio ha sido planteada por algunos políticos del país y repetiría la situación creada en 2011, cuando Islamabad vetó el uso de esas vías después de un ataque estadounidense en la frontera en el que murieron por error 24 militares paquistaníes.

Las vías se reabrieron en 2012 tras meses de discusiones y son consideradas fundamentales para la retirada de las fuerzas de la OTAN, que a finales del próximo año pondrá fin a su misión de combate en Afganistán.