La OTAN aprobará la cooperación concreta con la UE en áreas como las amenazas híbridas

Los ministros de Exteriores de la OTAN aprobarán mañana unas 40 medidas concretas de colaboración con la Unión Europea en áreas como las amenazas híbridas o los ciberataques, informó hoy el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg.

“Esta semana espero que demos un significativo paso adelante”, dijo Stoltenberg en una rueda de prensa sobre la cooperación con la UE, el principal asunto en la agenda de los ministros de Exteriores aliados, que inician mañana una reunión de dos días.

El político noruego señaló que los ministros, en su primera sesión de trabajo -en la que participará como invitada la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini-, aprobarán un paquete de unas 40 medidas para materializar los objetivos de la declaración conjunta firmada por las dos organizaciones en la cumbre aliada de julio en Varsovia.

Entonces, Stoltenberg y los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, firmaron un documento en el que se comprometían a colaborar más estrechamente en siete áreas, entre ellas la lucha contra los ataques híbridos (con componentes militares pero con medidas de propaganda o desinformación) o los cibernéticos.

También la cooperación en desarrollo de capacidades militares o en operaciones marítimas, como las tareas que realizan conjuntamente en el mar Egeo contra las mafias migratorias o el apoyo que proporciona la misión aliada “Guardián del Mar” a la comunitaria “Sofía” en el Mediterráneo central con los mismos fines, un apoyo de la Alianza por el momento centrado en el suministro de información.

Stoltenberg destacó el “impulso” que han tomado las relaciones con la UE en los dos últimos años, en los que han “entendido la importancia de nuestra cooperación” ante nuevos retos.

La UE y la OTAN tienen cada una 28 países miembros, de los que comparten 22.

El Consejo de la UE, por su parte, tiene previsto aprobar mañana formalmente por su parte el refuerzo de su colaboración con la OTAN, según dijeron tanto fuentes aliadas como diplomáticas.

Una cooperación más estrecha con la OTAN, sin solapamientos, entra dentro de los planes de la UE para potenciar su política de defensa y seguridad común, con lo que busca convertirse en una potencia militar con más autonomía.

“Estamos muy a favor de que la UE construya sus capacidades, pero que sean complementarias a los esfuerzos de la OTAN y no compitan. Hasta ahora vamos bien, según los detalles de los planes de la UE”, afirmó por su parte el embajador estadounidense ante la Alianza, Douglas Lute, en una rueda de prensa.

Según dijo, un proyecto concreto en el que colaborará la OTAN es el centro europeo contra amenazas híbridas que estará en Finlandia.

También empezarán a “sincronizar” sus actividades y ejercicios paralelos sobre los que los expertos de cada parte podrán llevar a cabo “más consultas” y a los que podrán enviar observadores.

“El aislamiento entre ambos no puede ser el modelo del futuro”, dijo Lute.

En la segunda sesión de trabajo los ministros repasarán las medidas de apoyo a la coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico (a la que la OTAN aporta aviones de vigilancia Awacs) y a países como Irak, al que han trasladado parte de sus actividades de formación de oficiales desde Jordania (en particular, efectivos españoles imparten entrenamiento sobre artefactos explosivos).

Durante la cena de trabajo, hablarán de sus relaciones con Rusia y cómo el refuerzo aliado no es incompatible con el diálogo con Moscú, según Lute.

El miércoles abordarán la cooperación con Ucrania y la misión de apoyo a las fuerzas afganas.

Por lo que se refiere a la cooperación con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, fuentes diplomáticas dijeron que se espera “confirmar la solidez del vínculo transatlántico” en la cumbre que la OTAN organizará en Bruselas el año próximo para dar la bienvenida a la nueva Administración estadounidense y para la que aún no hay una fecha determinada.

La cita, que debe servir para inaugurar la nueva sede de la Alianza, podría retrasarse a más allá de la próxima primavera -fecha tentativa- ante los nuevos retrasos en las obras.