PP, IU y UPyD, decididos a restablecer el normal desarrollo de los plenos de la Asamblea de Madrid

Representantes de los Grupos Parlamentarios de PP, IU y UPyD en la Asamblea de Madrid han mostrado este martes su “decidida voluntad” para restablecer el normal desarrollo de los plenos de la Asamblea de Madrid y evitar episodios como los de las dos últimas sesiones, en las que fueron expulsados seis diputados socialistas por llamar “corrupto” al presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.

En la rueda de prensa tras la reunión de la Junta de Portavoces de la Asamblea de Madrid, representantes de todos los grupos se han referido a lo sucedido en los últimos plenos, que ha hecho que Echeverría les haya reclamado “rebajar la tensión” y “serenar los ánimos” para mejorar el “clima” en la Asamblea de Madrid.

Según fuentes parlamentarias, en la reunión de la Junta, Echeverría ha dicho a los Grupos que está “muy preocupado” por lo sucedido en los dos últimos plenos, que no hace otra cosa que “manchar y desprestigiar” a la Asamblea.

Por eso, ha mostrado su “preocupación sincera” y les ha pedido “colaboración para reconducir la situación y que las sesiones se desarrollen con el orden y el respeto adecuados”, lo cual “no significa que el debate pierda intensidad, sino que gane en rigor y respeto mutuo”. Además, ha mostrado su “voluntad de contribuir a un mejor clima” para salir del “punto muerto” en el que se encuentran.

Tras escuchar al presidente y ya en la Junta de Portavoces, el portavoz del PP, Íñigo Henríquez de Luna, ha pedido un “clima de mayor respeto” y ha mostrado su disposición a “trabajar con el presidente para que se recupere la normalidad institucional”; pero ha criticado que el PSOE “ha hecho de la injuria y calumnia un arma política”.

Al igual que Echeverría, Henríquez de Luna ha dicho que los populares son los “más interesados en que vuelva la normalidad política” y tras decir que Gómez cada vez vive menos “en el mundo real”, ha defendido la actitud de Echeverría, que ha actuado “con bastante independencia de su grupo”.

Por su parte, el portavoz de IU, Gregorio Gordo, ha destacado que IU ni ha participado ni va a participar de “esta situación de enloquecimiento generalizado” y ha apuntado que la situación “aconseja poner los contadores a cero y hablar de cosas que interesan a los madrileños”.

Gordo, que ha dicho que rechazan las acusaciones de corrupción por parte de Menéndez y de González, ha señalado que Echeverría “interpreta el Reglamento de una manera tremendamente restrictiva” y de una manera “muy parcial y partidista”.

En este mismo sentido, su homólogo de UPyD, Luis de Velasco, ha criticado las formas de los socialistas y populares, pero ha mostrado su “decidida voluntad de contribuir al normal desarrollo de las sesiones” y ha asegurado su “total colaboración” para alcanzar este fin.

Luis de Velasco también ha criticado las acusaciones de corrupción, ha pedido la reconsideración de la sanción a Menéndez y ha criticado el “desacertado” comportamiento de los diputados socialistas expulsados en el pasado pleno.

“NO SE PUEDE TAPAR LLA BOCA A LA OPOSICIÓN”

Por último, preguntado por este tema, el portavoz socialista, Tomás Gómez, ha explicado que están denunciando “graves problemas de calidad democrática”, ya que hay temas que en la Asamblea “están vetados”.

“No se puede tapar a la oposición la boca”, ha exclamado el líder del PSM quien interpelado sobre la estrategia que siguió el PSOE en el pasado pleno, ha señalado que si González “comparece para hablar del ático y de las conexiones con la trama Gürtel se acaba el problema”.

El líder del PSM ha justificado su actuación afirmando que lo que quieren es poner de manifiesto el “grave déficit democrático” que hay en Madrid y la expulsión de su compañera de filas Maru Menéndez, una sanción que, en su opinión, “puede alterar las mayorías y minorías de los parlamentos” y que solo hay un precedente en Venezuela.

A su juicio, la decisión de Echeverría “atenta” contra el derecho al debate, a la libertad de expresión y al derecho de representación, por lo que ha insistido en la necesidad de que haya “más calidad democrática”.