Parados “escriben” el libro de Santiago Sierra “El trabajo es la dictadura”

Treinta personas, procedentes de las listas del paro, trabajan desde ayer escribiendo la frase “El trabajo es la Dictadura” en el libro de artista de Santiago Sierra, perteneciente a la serie LiberArs de la editorial Ivorypress.

El proyecto se desarrollará durante nueve días en los espacios expositivos de Ivorypress, donde en cada una de las cinco mesas presentes trabajan seis personas escribiendo “El trabajo es la Dictadura” en una de las caras de libros de pequeño formato y de 120 páginas.

Para esta iniciativa se puso un anuncio en el Servicio Público de Empleo, antiguo INEM, en el que se solicitaba auxiliares administrativos que tuvieran buena caligrafía para trabajar durante ocho días laborables. La contraprestación es algo mayor que el salario mínimo recomendado.

Con un bolígrafo convencional y sobre los libros aún vacíos, impresos tan solo con líneas azules que emulan el papel que se usa en los cuadernos escolares, su trabajo servirá de reflexión y denuncia de la situación actual del empleo en España.

Los espacios de la galería están abiertos a los visitantes que pueden contemplar el trabajo en los libros que, según se van finalizando, se ponen a la venta a un precio de 24 euros.

Habitualmente las obras de esta serie se venden a 18 euros, “pero en esta ocasión el coste ha sido mucho más alto”, comentó a Efe Antonio Sanz, director de Ivorypress, quien recordó que habrá una tirada de mil ejemplares.

Según lo previsto, cada uno de los trabajadores completará diariamente cuatro ejemplares, teniendo en cuenta que en escribir cada uno de ellos se tarda dos horas.

“Desde la editorial nos acercamos a los artistas y les proponemos hacer un libro de artista. Cada uno de ellos hace lo que quiere ya que el único condicionante es el formato. Santiago Sierra ha optado por hacer una performance cuyo resultado es el libro”, señaló Antonio Sanz.

La selección de trabajadores se realizó ayer por orden de llegada a una convocatoria a la que fueron muchas las personas que se presentaron. Además, existe algún otro caso en que el trabajador, cumpliendo los requisitos pedidos, se ha dirigido directamente a la editorial.

Este es el caso de un joven escritor de 33 años que conoció la convocatoria por las redes sociales y que ha llegado en autobús desde Barcelona para participar en una performance cuyo objetivo final le parece muy interesante.

“Somos una parte de esa obra de manera anónima. Creo que a nivel filosófico y de reflexión es más interesante para los que estamos escribiendo que para los que nos ven”, señaló.

Otros trabajadores, cuyas edades oscilan entre los 25 y 35 años y que en su gran mayoría no saben quien es Santiago Sierra, no se muestran tan contentos y ayer, incluso, alguno se fue cuando se le informó en que consistía el trabajo.

Creen que la labor que se les ha encomendado es “muy pesada” y reconocen que al responder al anuncio no pensaron que se trataba de escribir una frase en un libro, ni tampoco sus familiares “a quien ha extrañado mucho todo esto”, comentaba una joven.

Este proyecto está en línea con el trabajo artístico de Santiago Sierra (Madrid, 1966), que ha realizado en los últimos diez años un gran número de performances reivindicativas en las que han participado personas que son, de alguna manera, víctimas de la situación que se denuncia.

Coincidiendo con esta acción, el público podrá visitar en la galería Helga de Alvear la exposición “Los Encargados”, muestra realizada por Santiago Sierra conjuntamente con el artista madrileño Jorge Galindo.