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El Parlament aprueba la declaración de soberanía sin el apoyo del PSC

El Parlament pospone a la sesión de tarde el debate de la declaración soberanista. / Efe

Jordi Mumbrú

Barcelona —

El Parlament ha logrado aprobar la declaración de soberanía y del derecho a decidir con los votos de CiU, ERC, ICV-EUiA y de uno de los tres diputados de la CUP. Los intentos para conseguir que el PSC se sumara al carro del sobernaismo ha sido en vano. Los socialistas, divididos sobre esta cuestión, han anunciado a primera hora que se opondrían al texto pero no estaba nada claro si todos los diputados socialistas votarían lo mismo. Al final cinco de ellos no han votado, para mostrar así su descontento con la órdenes de la dirección de partido. La votación se ha cerrado con 85 votos a favor, 41 votos en contra y dos abstenciones. En la votación han faltado también dos diputados del PP que estaban enfermos.

Uno de los impulsores de la declaración soberanista, Oriol Junqueras, de ERC, ha recordado que las leyes internacionales reconocen el derecho a la autodeterminación y que votar para decidir si se quiere seguir formando parte de España o no es un acto tan democrático como legítimo. En una línea parecida se ha expresado Joan Herrera, de ICV-EUiA. El político ecosocialista ha criticado que las relaciones con España “se han estancado”, en gran parte desde 2010, después de la sentencia del Tribunal Constitucional contra el Estatut. Los dos políticos han coincidido en que la declaración no es independentista sino en favor del derecho a decidir. Pero no han logrado convencer a los socialistas. El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha acusado a Artur Mas de hablar “de los temas nacionales para tapar los problemas sociales” y ha recordado su apuesta por el federalismo.

El documento aprobado por el Parlament incluye algunos aspectos que no gustan nada al PSC ya que suponen, desde su punto de vista, “una declaración unilateral de soberanía”, según ha criticado Navarro. El punto de la declaración que ha frenado a los socialistas es el que fija que “el pueblo de Catalunya tiene, por razones de legitimidad democrática, carácter de sujeto político y jurídico soberano”. El otro punto que no gusta al partido con sede en calle Nicaragua es el que anuncia que se utilizarán “todos los marcos legales existentes” para conseguir tirar adelante el referéndum.

Los socialistas, que llevaban el derecho a decidir en su programa pero sólo dentro de la legalidad, querían que se utilizará sólo el marco legal catalán y español. Aún así, la decisión del PSC de votar en contra no ha sido nada fácil. Los socialistas han estado discutiendo su voto hasta última hora e incluso después de que empezara la sesión se veían movimientos entre pasillos. Un sector del partido estaba a favor de la declaración pactada entre CiU, ERC y ICV y había pedido, al menos, libertad de voto para los diputados. En un pulso con este sector crítico y más soberanista, Navarro ha dicho que de ninguna de las maneras pero han desoído su órdenes y no han emitido su voto.

Para evitar salir en la misma foto que el PP, el líder socialista ha asegurado durante su intervención que su partido no comparte ni el punto de vista social ni nacional con los populares. Consciente de ello, Alicia Sánchez Camacho le ha dicho: “Señor Navarro bienvenido al lado de la democracia. (...) Bienvenido al lado del Partido Popular”.

El Gobierno de “los mismos”

Antes de la votación del polémico documento, el President ha presentado la estructura y la composición del nuevo Gobierno. Ha costado mucho no mezclar debates y la mayoría de las intervenciones se han hecho hablando más de la declaración que se votaba más tarde que no del equipo que ha escogido Artur Mas. La mayoría de partidos han criticado, por motivos sociales o nacionales, la composición del Govern. El tono menos duro lo ha utilizado Oriol Junqueras, de ERC y también se ha apreciado un cambio en las palabras de Joan Herrera, de ICV.

El líder ecosocialista celebró que Artur Mas haya empezado a criticar el “fundamentalismo de la austeridad” y que incluya en su discurso el concepto de la “redistribución” de las riquezas. Aún así, ha puesto en duda que el Gobierno de “los mismos” pueda hacer una política distinta. En el turno de réplica, Artur Mas reprochó a Herrera: “En cambio ustedes siempre tienen el mismo discurso”.

La intervención más incendiaria la ha protagonizado David Fernández, de las CUP. Ha hablado de “gángsters con corbata” y de “saqueo neoliberal” y ha asegurado que intentarán construir una alternativa para que el 1% deje de gobernar sobre el 99%.

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