Pastor reivindica “momentos buenos” en su primer año de presidenta del Congreso

La presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, ha reivindicado hoy los “momentos buenos”, que en su opinión han sido “muchos”, durante su primer año al frente de la Cámara Baja, habida cuenta de que el foco recae habitualmente más sobre los “malos”.

Pastor, invitada por el Círculo de Empresarios de Galicia para pronunciar una conferencia sobre los 40 años de democracia, un acto en el que ha sido presentada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho hincapié en la actividad legislativa “muy intensa” en este último año.

Ha aludido a la aprobación de leyes, a la creación de nueve subcomisiones donde se están tratando en algunas de ellas “los temas más relevantes para el país”, y a la búsqueda de pactos de Estado por la educación, la justicia y la violencia de género.

También se ha referido a la aprobación de los presupuestos generales del Estado y a la próxima del techo de gasto, y de una docena de reales decretos ley.

Con todo, ha admitido que la actual legislatura está siendo “totalmente diferente” a las que vivió como diputada, con un Parlamento “muy fragmentado” y que está siendo “el centro de la vida política más que nunca”.

Ha abundado en que el Congreso no es solo “la caja de resonancia” de la actividad política, sino también el lugar “donde se toman las decisiones, donde hay que llegar a acuerdos, buscar apoyos”.

Respecto a las formas en algunos debates, Ana Pastor ha recalcado que “todos los que nos sentamos allí es porque nos han votado y elegido”, si bien su deber como presidenta es “garantizar y mejorar, si cabe, la imagen del Congreso”.

Y ha sido en este punto donde ha dicho tener “la impresión” de que “se dice casi todo lo negativo de lo que ocurre y se pone poco en valor las cosas positivas que también se hacen”.

Desde su posición de presidenta de las Cortes, Ana Pastor ha evitado pronunciarse sobre el debate de Cataluña, más allá de reiterar que “nadie está por encima de la ley” y que “todos los españoles tenemos el deber de cumplir con la Constitución y con las leyes”.

Tampoco ha hablado, aunque en la anterior legislatura fuera la ministra de Fomento, de la petición de Galicia de la transferencia de la autopista AP-9, y ha añadido que “eso le corresponde a los ejecutivos. No tengo nada que decir”.

Por lo demás, Ana Pastor ha señalado que en España “no estamos para triunfalismos porque queda mucho por hacer, pero tenemos que caminar juntos”.

Ha considerado que en vista de las previsiones de crecimiento económico de diferentes organismos y entidades es “un buen momento” para impulsar sectores estratégicos y dar “un salto cualitativo” para generar “oportunidades” para el “nuevo capital humano”.