Peña Nieto y su esposa, en la mira por su patrimonio en medio de protestas

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció hoy que hará público su patrimonio personal en respuesta a la polémica por el origen de una lujosa propiedad de su esposa, que amenaza con caldear los ánimos de las crecientes protestas por la desaparición de 43 estudiantes.

Peña Nieto justificó este miércoles su decisión durante un acto público en el occidental estado de Michoacán con el argumento de que valora más “la confianza de los mexicanos que el derecho a la confidencialidad”.

En México, los funcionarios de cualquier nivel deben presentar una declaración patrimonial, aunque tienen libertad para decidir si la hacen pública o no.

En 2013 Peña Nieto publicó la suya en la página web de la Presidencia, según la cual tiene nueve propiedades (cuatro casas, un apartamento y cuatro terrenos), aunque el documento no aclara su valor ni su ubicación, sólo los metros cuadrados y que en seis de los casos fueron adquiridas bajo la fórmula de una “donación”.

El martes el mandatario anunció que su esposa Angélica Rivera respondería a “falsedades” sobre la propiedad de la discordia, una mansión de 54 millones de pesos mexicanos (casi cuatro millones de dólares) ubicada en el selecto barrio capitalino de Las Lomas y cuya existencia fue revelada hace 10 días en una investigación periodística.

“Lamento que en el marco de todo este clima de consternación se levanten señalamientos infundados y con aseveraciones totalmente imprecisas”, apuntó Peña Nieto.

Advirtió también de los “movimientos de violencia” que pretenden generar “desestabilización” y “desorden social”, y atentar contra su proyecto de nación, centrado en reformas estructurales como la liberalización del sector energético.

Desde que el pasado 26 de septiembre desaparecieran 43 estudiantes en el estado sureño de Guerrero en una operación coordinada por autoridades locales corruptas y el crimen organizado, la indignación y las protestas contra la clase política han crecido de forma paulatina.

Algunas han terminado en ataques de edificios públicos, sobre todo en Guerrero, pero también en Ciudad de México, donde unos encapuchados quemaron una de las puertas del emblemático Palacio Nacional hace menos de dos semanas.

Horas después de que lo anticipara su esposo, Rivera anunció el martes en su página web que venderá los derechos que tiene sobre la mansión.

Explicó que inició su carrera como actriz a los 15 años y que trabajó 25 con la empresa Televisa, con la que firmó en 2004 un contrato por el cual en 2008 se le otorgó el uso de una residencia, cuya escritura se expidió en su favor el 14 de diciembre de 2010 en pago por su trabajo en exclusividad.

Más tarde, el 12 de enero de 2012, acordó con una inmobiliaria la compra de una casa adyacente a la primera. Indicó que ha pagado ya 14,3 millones de pesos (unos 1,06 millones de dólares) por el inmueble, casi 30 % del total pactado, pero que venderá sus derechos sobre la propiedad.

La primera dama pretendió con su aclaración evitar que el caso “siga siendo un pretexto para ofender” y “difamar” a su familia.

Peña Nieto alabó este miércoles a su esposa, para la que dijo sólo tener “palabras de gratitud, reconocimiento y cariño” porque no tenía “obligación” de revelar esa información.

Según la investigación periodística que desató la controversia, la casa es custodiada por la guardia presidencial y fue construida por la empresa Higa, que ganó varios proyectos de infraestructura en el central Estado de México cuando Peña Nieto era gobernador de ese territorio aledaño a la capital.

Rivera reconoció el martes haber acordado los detalles de la operación inmobiliaria con Juan Armando Hinojosa, dueño de Higa.

Este miércoles, el portavoz del Gobierno, Eduardo Sánchez, declaró que Rivera “no tiene facultades para celebrar contratos a nombre del Gobierno” y, por tanto, “no existe conflicto de interés” en este asunto.

Detalló que Higa solo tiene dos contratos con el Gobierno de los “más de 6.396” firmados desde el inicio de la actual Administración en diciembre de 2012, uno por 450 millones de pesos (unos 33 millones de dólares) y otro por la construcción del hangar presidencial por un monto que no precisó.

Ambos “no representan ni el 1 % del monto de 184.000 millones de pesos (13.529 millones de dólares)” destinados a infraestructura desde entonces, puntualizó.

Higa tiene participación en la empresa Teya, socia de la china Railways, que este año ganó una licitación para construir un tren de alta velocidad en el estado central de Querétaro.

Esa licitación fue cancelada recientemente por el presidente tras las críticas a un proceso que contó con un solo participante, y sólo dos días antes de que el reportaje fuera publicado.

La polémica se produce pocas horas antes de que la capital mexicana y otros puntos del país sean escenario de multitudinarias movilizaciones por la desaparición de los 43 estudiantes.