Piden a Trump que abogue por el activista taiwanés en su encuentro con Xi

En vísperas del encuentro entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, grupos pro derechos humanos en Taiwán pidieron al mandatario norteamericano que abogue por la liberación del activista taiwanés Lee Ming-che, detenido desde marzo en China.

Numerosos grupos taiwaneses a favor de los derechos humanos organizaron hoy una reunión informativa en la que reiteraron sus llamadas a la liberación de Lee, juzgado por un tribunal de Hunan (sur) y cuya sentencia podría conocerse próximamente.

Lee, que fue detenido al llegar a China procedente de Macao, en marzo de este año, y del que no se supo nada en meses, confesó haber criticado al Partido Comunista y hecho propaganda de la democracia occidental, durante el juicio, calificado de “escenificación teatral” por grupos pro derechos humanos en la isla.

“Aunque las sentencias de casos similares suelen tardar menos de tres meses, en esta ocasión puede durar más para que no coincida con el viaje de Trump a China”, dijo a Efe el director de Estudios Estratégicos de la Universidad Tamkang, Li Da-jong.

En la transmisión en directo del juicio, se pudo observar cómo los fiscales utilizaban como pruebas de la acusación de “subversión del poder estatal” los comentarios de Lee en las redes sociales, mientras se encontraba en Taiwán.

“Muchos temen ir a China o pasar por Hong Kong porque el caso de Lee ha sentado un precedente de que China puede condenarte por lo que digas en el exterior”, estimó hoy Chiu E-ling, secretario general de la Asociación Taiwanesa por los Derechos Humanos, tras la rueda de prensa.

Los activistas de derechos humanos en Taiwán consideran que Lee puede ser condenado a un mínimo de 10 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.

Tanto la esposa de Lee como grupos de derechos humanos taiwaneses lanzaron una campaña internacional para la liberación de Lee que logró el apoyo de congresistas estadounidenses y parlamentarios de la Unión Europea.

Lee fue un empleado del independentista Partido Demócrata Progresista, que gobierna Taiwán, y es profesor en una universidad comunitaria y voluntario en la organización no gubernamental Covenant Watch de Taipei.