Rajoy y otros líderes abordan este jueves el “espinoso” asunto del presupuesto de la UE en una cena en Bruselas

“Se trata de tener un debate sereno sobre cuestiones espinosas, con el fin de construir puentes entre países cuyas realidades a veces son diferentes”, han explicado a Europa Press fuentes del Gobierno belga, que destacan entre la actualidad europea la cuestión presupuestaria.

Los líderes de la UE a 27 llevan en su agenda de la cumbre del viernes una primera discusión sobre el futuro marco financiero, sobre el que la Comisión Europea prevé presentar su propuesta formal a principios de mayo.

Bruselas ha avisado de que los gobiernos deberán incrementar su contribución para poder financiar nuevas prioridades y cubrir los fondos que la UE dejará de ingresar por la salida de Reino Unido del bloque, entre 12.000 y 14.000 millones.

Entre las líneas apuntadas por el Ejecutivo comunitario figuran recortes en los fondos que más han beneficiado a España hasta ahora, los de cohesión y el gasto agrícola.

A la cena previa del jueves, también de carácter “informal” y que tendrá lugar en el castillo de Val Duchesse (Bruselas), Michel ha citado a los líderes de Francia, Emmanuel Macron; Alemania, Angela Merkel; de Portugal, Antonio Costa, y de Italia, Paolo Gentiloni, entre otros.

También asistirán el primer ministro búlgaro y presidente de turno de la UE, Boiko Borissov; el irlandés Leo Varadkar; el finlandés Juha Sipilä, el luxemburgués Xavier Bettel y el eslovaco et Robert Fico.

Desde el Ejecutivo belga subrayan que no se trata de crear “un grupo u otro de interés” basado en los países fundadores, contribuyentes netos a los presupuestos u otros criterios.

El objetivo, añaden las fuentes consultadas por Europa Press, es “ir más allá de las diferencias tradicionales”, en un momento en el que algunos presentan las divergencias entre el Este y el Oeste o el Norte y el Sur como “insalvables”.

Con ello, los líderes de distintas zonas geográficas podrán intercambiar puntos de vista sobre la agenda europea, en especial el futuro presupuesto. Un asunto “estratégico” que pasa por poner cifras a las nuevas prioridades de la Unión Europea, como la inmigración, la seguridad y la defensa, y que deberá responder a cómo repercutirá en grandes partidas como la de cohesión o agrícola y si sus partidas deben condicionarse al respeto del Estado de derecho, concluyen las fuentes.