El buque 'Rayo' atracará hoy en Gran Canaria con los fallecidos del helicóptero de la base de Gando

El buque de acción marítima 'Rayo' viaja de regreso al Arsenal de Las Palmas, con los cuerpos del capitán José Morales, el teniente Saúl López Quesada y el sargento Johnander Ojeda, tripulación del helicóptero accidentado el pasado día 22 a unos 74 kilómetros de la costa del Sahara.

El 'Rayo“ atracará en la base naval a primeras horas de mañana domingo y una vez que tomen tierra los cadáveres de los soldados del Escuadrón 802, estos serán trasladados al Instituto Anatómico Forense de Las Palmas de Gran Canaria para la autopsia y los trámites legales y, acto seguido, serán velados en la base aérea de Gando, donde estaban destinados, ha informado el Ministerio.

El Ejército del Aire se encargará del funeral a los soldados en su base de Gran Canaria y Defensa no descarta que se pueda oficiar esa misma tarde para no alargar el sufrimiento de las familiares y compañeros, aunque eso dependerá del tiempo que estén los cuerpos en el Anatómico Forense.

Los buzos de la Armada recuperaron ayer tarde el cuerpo del tercero de los militares fallecidos en el accidente de la aeronave del servicio de rescate aéreo (SAR) después de que el viernes se recuperaran los dos primeros cadáveres en una operación que se intensificó para que no afectara las malas condiciones atmosféricas que se prevén en la zona donde está hundida la aeronave.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que visitó este sábado en la base aérea de Gando a los familiares de los tres militares y se ha reunido con los mandos que dirigen la operación, expresó solo media hora antes del rescate su confianza en que hoy mismo los buzos de la Armada subieran al “Rayo” el cuerpo del soldado que permanecía aún en la cabina del helicóptero.

Rajoy se reunió con los familiares y compañeros de los tres miembros del Ejército del Aire y mantuvo un encuentro con los mandos militares encargados de las tareas de rescate, al que también asistieron el ministro de Defensa, Pedro Morenés, el de Industria, José Manuel Soria, y el presidente de Canarias, Fernando Clavijo.

El jefe del Ejecutivo trasladó sus condolencias y su solidaridad y, en rueda de prensa posterior en Telde, reconoció que están viviendo una situación muy dura por la pérdida de seres queridos y por informaciones confusas habidas hasta la localización de los cuerpos.

Mariano Rajoy recordó que hubo “rumores de todo tipo”, ya que incluso se barajó la posibilidad de un secuestro.

Pero cree que ya no tiene sentido entrar en esas informaciones contradictorias porque, “desgraciadamente”, ya se sabe que “lo que ha ocurrido es lo peor que podía pasar” y, pese a ello, aseguró que las familias han dado muestras de una gran entereza.

Rajoy defendió como prioritario “averiguar cuáles han sido las causas del accidente” y que adelantó que “eso corresponderá decidirlo al juez, quien lógicamente pedirá los informes periciales que él considere oportunos”.

También apuntó que siempre que ocurre un accidente como este es determinante conocer sus causas por si hubiera alguna razón de tipo técnico y, en el futuro, se pude evitar que ocurra algo similar.

“Está en manos del juez, pero estoy absolutamente convencido de que, como siempre sucede, sabremos al final qué es lo que ocurrió”, insistió antes de confiar en que se puedan conocer las causas del siniestro lo más rápido posible.

El presidente del Gobierno rechazó coincidencias con el accidente de otro helicóptero del SAR de Gando en 2014, entre Fuerteventura y Lanzarote, en el que perdieron la vida otros cuatro militares y se salvó uno, el ahora fallecido Jhonander Ojeda.

Le han asegurado, según explicó, que no tienen “absolutamente nada que ver” y que, además, España está por debajo de la media europea y de la OTAN en accidentes de aeronave militares.

Completada la primera fase del operativo de rescate, ahora el objetivo es el izado de la cabina para ayudar a despejar las incógnitas que persisten sobre lo que le ocurrió al Superpuma del Ejército del Aire, que se precipitó al mar a más de 500 kilómetros al sur de Gran Canaria. Defensa advierte de que eso llevará algún tiempo.

En la zona donde se encuentra hundido el helicóptero militar permanece el buque “Olimpic Zeus”, mientras que los cazaminas “Turia” y “Segura” están de tránsito a Las Palmas de Gran Canaria para repostar combustible y, a continuación, proseguir con los trabajos de rescate de la aeronave.

Las condiciones meteorológicas en la zona han impedido comenzar las tareas de izado del aparato, que solo empezaran cuando el estado de la mar lo permita, concluye Defensa.