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Transparencia Internacional: la clase política no tiene madurez para dialogar

Transparencia Internacional: la clase política no tiene madurez para dialogar

EFE

Madrid —

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El presidente de Transparencia Internacional (TI) en España, Jesús Lizcano, considera que las formaciones y los responsables políticos “no tienen la madurez suficiente” para dialogar, debatir y consensuar mínimamente sobre la situación catalana y, por ello, “la democracia se va resintiendo”.

En una entrevista con Efe, este catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid plantea la creación urgente, a partir del 2 de octubre, de una comisión de análisis sobre la hipotética secesión de Cataluña, o “Catalexit”, que sería “la mejor vía” para ofrecer a la ciudadanía información “clara, ordenada y mínimamente rigurosa” y disminuir el nivel de crispación.

Lizcano propone que esa comisión de estudio, que estaría integrada por expertos universitarios, representantes de formaciones políticas y otras instituciones, elabore, en primer lugar, una lista ordenada de los aspectos más importantes derivados de la salida de Cataluña del Estado español.

Una vez consensuado este conjunto de materias, se pasaría a analizar con cierto detalle “cada una de ellas”, divulgándose después los resultados, y dando a conocer así los diversos efectos que “de uno u otro signo” conllevaría para los ciudadanos el “Catalexit”.

El responsable de TI-España insiste en que la clase política “no viene estando a la altura de los ciudadanos”, y de ahí la importante “desafección y lejanía” existentes por parte de la sociedad, que ha desembocado en la situación actual.

Hasta ahora, y en opinión de Lizcano, el proceso en Cataluña ha adolecido de una “importante falta de transparencia social”, ya que no se ha informado a los ciudadanos y a la sociedad en su conjunto sobre los efectos “de uno u otro tipo” que podría tener la secesión catalana.

Y una de las cuestiones que Lizcano estima de “mayor interés” para los ciudadanos son las consecuencias que conllevaría una Cataluña independiente en relación con la Unión Europea.

Según Lizcano, “Cataluña tendría que salir de la UE, al menos temporalmente, para volver posteriormente a solicitar y en su caso ingresar en la misma”.

Otra de las cuestiones que el presidente de TI-España debería aclarar a los ciudadanos es el de las pensiones, dado que existe un sistema de caja única estatal, donde se van acumulando todas las cotizaciones.

Por tanto, explica, sería necesario informar cuál sería “la parte y la forma” en que los ciudadanos catalanes que se fueran jubilando recibirían sus pensiones y como se integrarían las cotizaciones futuras en Cataluña con las aportadas anteriormente en España.

Además, dice, habría que aclarar cuestiones como la situación de quienes hayan cotizado dentro y fuera de Cataluña o el trasvase automático o no de las futuras pensiones desde la caja estatal a la eventual caja catalana.

Lizcano insiste en que la responsabilidad de esta falta de transparencia corresponde “fundamentalmente” a los responsables públicos y políticos y confía en que en un futuro inmediato surjan estudios sobre el 'Catalexit' con un carácter divulgativo para su mejor comprensión por los ciudadanos.

También subraya que cualquier discurso que no lleve aparejado “un razonamiento documentado y unos criterios objetivos” puede resultar “estridente y agresivo políticamente” y, por tanto, originar una respuesta de confrontación automática entre las partes.

Es por ello, sostiene, que cualquier postura política deberá estar apoyada en argumentos “rigurosos y documentados” y evitar “el efecto rebote” en ámbitos políticamente opuestos.

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