La UE convoca para el próximo domingo una cumbre de líderes con Turquía

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha convocado para el próximo domingo, 29 de noviembre, una cumbre de líderes de la Unión Europea (UE) con Turquía, a fin de “revitalizar” las relaciones y frenar el flujo de refugiados.

“Convoco una cumbre UE-Turquía el domingo 29 de noviembre a las 15.00 GMT con el propósito de revitalizar nuestras relaciones y frenar el flujo migratorio”, informó Tusk en un mensaje de la red social Twitter.

Tusk explicó que su decisión se produce tras “una recomendación positiva de la Comisión Europea (CE) y una conversación por teléfono con el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu.

La celebración de la cumbre, que tendrá lugar en Bruselas -que se encuentra en el máximo estado de alerta por temor a un atentado terrorista-, fue acordada entre los líderes de la UE en la reunión que celebraron el pasado 12 de noviembre en La Valeta con los países africanos.

Con esta cumbre los jefes de Estado y de Gobierno de la UE satisfacen las reclamaciones de Turquía, que ha pedido debatir sobre la cuestión de los refugiados.

En la última cumbre europea, los líderes respaldaron un plan de acción con Turquía para contener la llegada de refugiados a territorio comunitario.

A cambio de un esfuerzo por parte de Ankara en este sentido, el plan contempla, entre otras cosas, la agilización de las negociaciones para liberalizar visados a los turcos y para la adhesión futura de ese país a la UE.

Además, la Comisión Europea (CE) ha propuesto incluir en el presupuesto comunitario 500 millones de euros para que Turquía gestione la llegada de refugiados a su territorio y ha pedido a los veintiocho socios que aporten otros 2.500 millones.

Cada país deberá aportar una suma de dinero basada en su Producto Interior Bruto, de tal modo que España tendría que desembolsar 191 millones de euros y Alemania sería la que más destinaría a ello, 534 millones.

De este modo se alcanzaría la cantidad de 3.000 millones de euros que Ankara ha reclamado para hacer frente a la presión que sufre en sus fronteras a causa de la llegada masiva de personas en busca de protección internacional y huyendo de conflictos como la guerra en Siria.