Los líderes africanos confían en mantener sus buenas relaciones con EEUU

Los líderes africanos dieron la bienvenida hoy al próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y manifestaron su deseo de que sus relaciones bilaterales se mantengan tras la victoria del candidato republicano.

Aunque Trump aseguró durante la campaña presidencial que si llegaba a la Casa Blanca se replantearía algunos aspectos de la política exterior, los presidentes africanos se han mostrado convencidos de que los vínculos entre EEUU y África no se verán afectados.

“Los lazos que unen a Kenia y Estados Unidos son cercanos y fuertes (...) nuestra amistad perdurará”, afirmó el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta.

En un país donde se idolatra al demócrata Barack Obama, cuyo padre nació en Kenia, Kenyatta destacó que con la victoria del antagónico Trump “el pueblo estadounidense ha hablado y lo ha hecho con claridad”.

Su vicepresidente, William Ruto, se mostró más contundente y alabó al candidato republicano por haberse impuesto “a la prensa negativa” y haber ganado “contundentemente” las elecciones estadounidenses.

Uno de los principales socios de EEUU en el continente, el presidente de Ruanda, Paul Kagame, opinó que la victoria de Trump ha sido “merecida” y espera continuar las “buenas relaciones” que su país mantiene con la Administración estadounidense, especialmente tras el genocidio de 1994.

“En nombre del pueblo de Burundi, le felicitamos cordialmente. Su victoria es la victoria de todos los estadounidenses”, afirmó el presidente burundés, Pierre Nkurunziza, cuyo Gobierno ha sido acusado por la ONU de graves violaciones a los derechos humanos que podrían constituir crímenes contra la humanidad.

El presidente de Senegal, Macky Sall, se congratuló de la victoria republicana y manifestó su voluntad de mantener “sus relaciones privilegiadas” tras la llegada de Trump al poder.

También felicitaron al candidato republicano a través de Twitter otros mandatarios africanos como el de Uganda, Yoweri Museveni, el de Ghana, John Mahama, o el de Tanzania, John Magufuli.

En los últimos años, Estados Unidos y China han competido por afianzar su presencia en África, batalla que ganó la superpotencia oriental cuando en 2009 sobrepasó a su rival económico como el principal socio inversor africano.

Obama ha sido criticado por el olvido que ha sufrido África durante su mandato, pese a que muchos confiaban en que sus raíces africanas ayudarían a incluir al continente entre sus prioridades.

En un intento de reconciliarse con el continente, Obama realizó una gira africana con una gran carga simbólica, ya que se que se convirtió en el primer mandatario estadounidense en activo en viajar a Kenia y a Etiopía.

De momento, Trump todavía no ha concretado qué papel jugará África en su política exterior durante los próximos cuatro años.