Un clérigo chií iraquí ordena a su milicia que abandone la provincia de Kirkuk

El clérigo chií iraquí Muqtada al Sadr pidió hoy a la milicia que controla, Saraya al Salam (Compañías de Paz), que deje la provincia de Kirkuk (norte de Irak) en un plazo de 72 horas y que cierre todas sus sedes, en cumplimiento de una orden de Bagdad.

En un comunicado, Al Sadr hizo hincapié en la importancia de ceder gradual y “exclusivamente” a las fuerzas estatales la responsabilidad de la seguridad en Kirkuk, provincia petrolera que está en el centro de las disputas territoriales entre Bagdad y los kurdos.

Asimismo, Al Sadr pidió a los integrantes de Saraya al Salam que no vuelvan a usar su nombre en asuntos políticos, de negocios o de cualquier tipo, en una aparente desvinculación del grupo.

A mediados de octubre el Gobierno iraquí recuperó el control de Kirkuk, después de haber forzado un repliegue de los kurdos, y prohibió la presencia de cualquier otro grupo armado en la provincia al margen de la Policía y las Fuerzas Antiterroristas.

Saraya al Salam forma parte del grupo de milicias Multitud Popular, una alianza armada liderada por chiíes y que cuenta con apoyo de Irán, que ha participado en la ofensiva contra el grupo Estado Islámico (EI) y también ha sido una de las facciones más beligerantes contra los kurdos en las últimas semanas.

El domingo pasado un doble atentado suicida cerca de una sede de Saraya al Salam en Kirkuk causó la muerte a cinco miembros de ese grupo.