El ejército egipcio refuerza su despliegue en el Sinaí tras el secuestro de siete soldados

El Ejército egipcio continuó hoy desplegando tropas y vehículos militares en zonas sensibles de la provincia del Norte del Sinaí, donde el pasado jueves fueron secuestrados siete policías y soldados, ante el temor del inicio de una ofensiva.

Según la agencia oficial egipcia, Mena, el refuerzo militar es “intenso” en la ciudad de Al Arish, capital del Norte del Sinaí, y en las localidades de Sheij Zawed y de Rafah, fronteriza con la franja palestina de Gaza.

En los últimos días se ha especulado con el inminente lanzamiento de una campaña militar en la península del Sinaí para liberar a los rehenes, pero ni la Presidencia egipcia ni las Fuerzas Armadas han confirmado por el momento esta posibilidad.

La zona es sobrevolada por helicópteros que efectúan fotografías y vigilan cualquier movimiento.

También se han establecido puestos de control de la Policía en zonas estratégicas, entre ellas la carretera principal y caminos aledaños, para prestar apoyo logístico a las Fuerzas Armadas.

Fuentes tribales señalaron a Mena que los clanes beduinos han intensificado sus esfuerzos para acabar con esta crisis sin que se produzcan enfrentamientos.

Ayer, la Presidencia egipcia aseguró que mantiene abiertas “todas las alternativas” para liberar a los rehenes y que no cederá a chantajes de los raptores.

El portavoz presidencial, Amr Amer, no quiso confirmar si entre las citadas alternativas figura el lanzamiento de una operación militar en el Sinaí.

Fuentes militares ya informaron a Efe ayer de que las autoridades egipcias habían enviado refuerzos policiales y militares al norte del Sinaí, ante la posibilidad de que se inicie una ofensiva.

Los siete miembros de las fuerzas de seguridad egipcias fueron secuestrados el pasado 16 de mayo por un grupo armado desconocido en la zona de Wadi al Ajdar, cuando se trasladaban por la carretera que une Al Arish con la población de Rafah.

Desde la revolución que derrocó al presidente Hosni Mubarak en febrero de 2011, se han hecho habituales los secuestros de extranjeros y los ataques contra las fuerzas del orden en el Sinaí.

Las autoridades egipcias lanzaron una amplia campaña de seguridad en la zona el pasado agosto contra grupos extremistas, tras el atentado ocurrido a principios de ese mes contra un puesto fronterizo en el que murieron dieciséis militares y policías.