Otros 24 enfermos en las cocinas del edificio en el que se citarán los líderes de la UE

Otros 24 empleados de las cocinas del Edificio Europa de Bruselas, donde el próximo jueves y viernes se reunirán los líderes de la Unión Europea (UE), precisaron hoy de asistencia médica por una leve intoxicación por gases nocivos, después de que el pasado viernes fueran atendidos 15 trabajadores.

La cumbre, según informó el Consejo Europeo en un comunicado, se celebrará tal y como estaba previsto y, en todo caso, el incidente afectaría sólo a la organización logística del servicio de suministro de comidas.

El “problema técnico” es consecuencia de una “mala reacción química de productos de limpieza”, precisaron a Efe fuentes del Consejo de Europa.

Los empleados, todos ellos personal externo al Consejo y vinculado a la empresa que explota los comedores, presentaron “síntomas leves” de intoxicación, como náuseas, vómitos y picor de ojos, como ya ocurrió el pasado viernes con 15 empleados, algunos de ellos también afectados hoy.

Los responsables del Edificio Europa han solicitado a los bomberos que vuelvan a investigar el incidente, que el pasado viernes ya intervinieron para investigar el problema.

Entonces se decidió desalojar el edificio y trasladar al personal al colindante Justus Lipsius mientras se limpiaban los conductos de ventilación durante el fin de semana.

El Edificio Europa volvió a abrirse el lunes con normalidad, pero 24 de los trabajadores de las cocinas han vuelto a presentar los mismos síntomas.

Las fuentes insistieron en que el incidente no afectará a la cumbre de líderes de la Unión Europea y señalaron que a lo largo del día se decidirá cómo organizar la logística alimentaria.

El Edificio Europa, planificado en 2004 e inaugurado el pasado diciembre tras una obra de 321 millones de euros, opera como sede anexa al tradicional centro operativo del Consejo Europeo, el Justus Lipsius, al que está conectado a través de una pasarela.

En las cumbres celebradas hasta ahora, el Edificio Europa se ha reservado a los líderes, mientras que el personal diplomático y la prensa continúa trabajando en el Justus Lipsius durante esas jornadas.