El exprimer ministro búlgaro Borisov recibe el encargo de formar gobierno

El presidente de Bulgaria, Rosen Plevneliev, entregó hoy el mandato de formar Gobierno al ex primer ministro conservador Boiko Borisov, que dejó el poder en febrero de 2013 tras una oleada de protestas ciudadanas.

“Todos sabemos de la necesidad de estabilidad política. Y eso se consigue tan solo a través de instituciones que funcionen. Deseo que Borisov encuentre la formula adecuada para la estabilidad del Estado”, declaró hoy Plevneliev en una intervención en la sede de la Presidencia.

La formación que lidera Borisov, Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB), ha acordado una coalición con otro partido conservador, Bloque Reformador, pero deben seguir sondeando a otros potenciales socios porque no tienen mayoría en el Parlamento búlgaro de 240 escaños.

En las pasadas elecciones del 5 de octubre, GERB quedó en primer lugar con 84 escaños y el Bloque Reformador obtuvo 23, y ambas formaciones tienen previsto reunirse hoy con el Frente Patriótico, que cuenta con 19 diputados, para buscar su respaldo.

Esas tres formaciones contarían con una mayoría absoluta de 126 escaños en el Parlamento.

Borisov, en una breve declaración a la prensa, dijo que no agotará el plazo oficial de una semana para someter a su Gobierno a votación en el Parlamento y avanzó que o bien anuncia mañana su Ejecutivo o devuelve el encargo a la Presidencia.

La presidenta del Parlamento, Tsetska Tsacheva, del GERB, indicó hoy a los periodistas que el próximo Gobierno podría someterse al voto de confianza de la Cámara este mismo viernes.

Ninguna formación logró una mayoría suficiente para gobernar en los pasados comicios legislativos, los segundos en 18 meses y de los que ha salido un Parlamento muy fragmentado.

La crisis política en Bulgaria, el país más pobre de la Unión Europea, se desató en febrero de 2013 al dimitir el Ejecutivo encabezado por Borisov, debido a una oleada de protestas contra el alto precio de la energía.

Después se celebraron unas elecciones anticipadas que otorgó el poder a un Ejecutivo de tecnócratas, respaldado en el Parlamento por los socialistas y la minoría turca, y que no consiguió aplacar las protestas ciudadanas y dimitió el pasado julio tras permanecer apenas un año en el poder.