Las familias de El Cavero aceptan instalarse en el campamento de urgencia

La familias que hoy han sido desalojadas del asentamiento El Cavero, en Olías del Rey (Toledo), han aceptado finalmente trasladarse al campamento de urgencia habilitado con tiendas de campaña por parte del Ayuntamiento de la localidad, cuyo alcalde, José Manuel Trigo, insiste en que es una solución temporal.

Las familias han llegado esta tarde, unas ocho horas después de que se haya producido el desalojo por parte de la autoridad judicial, pues han decidido permanecer en el recinto ferial de Olías del Rey hasta que mejoraran las condiciones de la parcela y se instalasen, entre otros elementos, dos generadores para poder tener electricidad y encender calefactores.

“No ha llegado la noche y yo ya estoy sintiendo la pelona”, ha dicho en declaraciones a Efe uno de los afectados por el desahucio, Víctor Jiménez, quien ha opinado que las instalaciones que les han proporcionado están “mal”, pero ha argumentado que no tienen “otro sitio al que ir”.

En esta parcela municipal, las familias cuentan con una casa prefabricada en la que se guardan los alimentos y las medicinas, dos carpas de 50 metros ignífugas, quince tiendas de campaña de cuatro personas, sacos de dormir, esterillas, dos depósitos de agua, dos generadores y cincuenta mantas que les ha proporcionado Cruz Roja.

A excepción de las mantas, el resto lo ha pagado el Ayuntamiento de Olías del Rey, que ya se ha gastado más de 10.000 euros.

Además, el alcalde ha querido agradecer en declaraciones a Efe el trabajo de todo el personal del Consistorio, que ha usado incluso sus vehículos para preparar el campamento.

No obstante, el alcalde ha recalcado que la vivienda no es competencia municipal y ha apuntado que la solución que han proporcionado es temporal.

Por otra parte, ha denunciado que el albergue público San Servando de Toledo les ha devuelto la transferencia con el dinero que habían pagado para reservar 23 plazas para embarazadas y personas mayores con enfermedades de El Cavero.

“No les han admitido”, ha criticado el alcalde, quien ha explicado que estas personas han sido atendidas en albergues de las localidades de Sonseca y Ajofrín, gasto que sufragará el Gobierno de Castilla-La Mancha, que también ha ayudado con 1.800 euros a las familias.

Mientras tanto, las familias que han llegado a esta parcela han recibido los lotes de comida que han repartido miembros de Protección Civil.

“No sé lo que va a pasar mañana, tampoco sé si van a poner un autobús para llevar a los niños al colegio”, ha apuntado a Efe Víctor Jiménez.

En total, han sido desalojadas 47 familias del asentamiento, un desahucio provocado por el estado de ruina del edificio que tenían ocupado, propiedad de la Tesorería General de la Seguridad Social.