Las familias del bloque de Salt quieren negociar para lograr un realojo colectivo

El objetivo de las familias de la obra social de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Girona que desde marzo ocupan un bloque en Salt es resistir hasta conseguir “un realojamiento colectivo”, han señalado hoy fuentes de la PAH al respecto de “la voluntad manifestada por las familias”.

“Hasta el momento sólo tenemos garantizado el realojamiento en régimen de cesión de uso temporal de cinco familias”, ha indicado el representante de la PAH, Sebastià Parra, que ha asegurado que necesitan “más tiempo”.

Por una parte, ha indicado Parra, para “seguir negociando qué pasará con las familias restantes, cómo será el contrato definitivo y cómo se garantizarán sus servicios básicos” y, por otra, para conseguir el objetivo del “realojo colectivo”.

Según la PAH Girona, hay indicios que llevan a pensar que este realojamiento colectivo “es viable”.

Entre otros aspectos, han recordado que han propuesto al banco Mare Nostrum (BMN) “que se siente a negociar la posibilidad que expuso, de realojar a todas las familias dentro de otro bloque, también en Salt”.

El portavoz ha querido dejar claro que no se trata de un “capricho”, sino que las familias siempre han “manifestado su voluntad de construir una vida en común” porque de esta manera han podido, entre otras cosas, resolver no sólo el problema de la vivienda, sino “unos mínimos necesarios en cuanto a alimentación, servicios básicos o la atención a la infancia”.

Desde la PAH aseguran que han estudiado todas las posibilidades ofrecidas por la administración, pero consideran que la propuesta de la Generalitat a cinco familias de cesión de uso de carácter temporal, que no un alquiler social, “no cuenta con las garantías contractuales adecuadas”.

Esta falta de garantías alegada se basa en que la Secretaría de la Vivienda se reserva el derecho de resolver el presente documento si lo justifican circunstancias sobrevenidas de interés público, tal y como queda reflejado en el contrato.

Una vez levantada la suspensión cautelar del desalojo de este bloque por parte del Tribunal de los Derechos humanos de Estrasburgo, el juzgado de Instrucción número 3 de Girona ha dado la orden de desalojarlo.

Este desalojo puede llevarse a cabo en cualquier momento, a pesar de que desde la PAH de Girona se han mostrado confiados en que les concedan tiempo para solucionar la situación de todas las familias con negociaciones, ha dicho, “que van por buen camino”.

El apoyo a la PAH de Girona ante el posible desalojo de hoy ha sido notablemente diferente al del pasado 16 de octubre, cuando un millar de personas procedentes de las PAH del resto de Cataluña y de diferentes puntos de España acudieron a dar su apoyo al bloque de Salt.

Esta mañana apenas unas 80 personas se han reunido en los números 91 y 93 de la calle Doctor Castany de Salt, una visualización evidente de la ruptura entre la PAH Girona y el resto de PAH catalanas.