Una oda a la figura de Trump abre el gran evento de los conservadores de EE.UU.

La Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), el gran evento del año para el conservadurismo estadounidense, arrancó hoy con el ensalzamiento al presidente, Donald Trump, la figura que les valió las elecciones en 2016 y que, esperan, les dé éxitos en las legislativas de este año.

La derecha de Estados Unidos acudió hoy al inicio del esperado acontecimiento político, donde tanto antiguos escépticos como defensores acérrimos del mandatario pusieron de manifiesto su optimismo ante los próximos tres años de su presidencia.

Entre consignas nacionalistas, ataques a la prensa, a los demócratas en general y al gobierno “socialista” del anterior presidente estadounidense, Barack Obama (2009-2017), en particular, cientos de personas se presentaron en la cita, que tiene lugar hasta el sábado en un gran hotel cercano la localidad de National Harbor (estado de Maryland), cercana a Washington.

El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, fue el encargado de inaugurar el encuentro, donde también hubo espacio para las reivindicaciones sobre el derecho a portar armas y ataques contra quienes buscan restringirlos tras la matanza de la semana pasada en una escuela de Parkland (Florida) que dejó 17 muertos.

Precisamente, Pence comenzó su intervención con este tema al asegurar que “ningún niño debe estar inseguro en su colegio” y ensalzó las propuestas de Trump de elevar la edad mínima para comprar fusiles y de controlar la venta de dispositivos que los convierten en armas automáticas.

Pence destacó los grandes hitos cosechados durante el primer año de Donald Trump al frente del Ejecutivo, refiriéndose entre ellos al reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel, a la reforma fiscal -tema bandera del mandatario- y a las políticas migratorias, que resumió con una frase lapidaria: “No tengan dudas, construiremos el muro” en la frontera con México.

En tono de campaña, llamó a la movilización de los votantes conservadores en las elecciones legislativas de noviembre próximo ante una oposición “motivada”: “Hagamos que hoy sea el día en que nosotros, como líderes, decidimos llevar a otra victoria al movimiento conservador en 2018”, arengó.

En relación a lo ocurrido en Parkland, el presidente de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, grupo estrechamente vinculado al Partido Republicano), Wayne LaPierre, subió al escenario para clamar contra quienes quieren ampliar los controles del acceso a las armas y reclamar soluciones dirigidas a proteger a los colegios de la misma forma que lo hacen con los famosos y los bancos.

LaPierre sostuvo que el problema no está en el fácil acceso a las armas, sino en el hecho de que Washington falla sistemáticamente a la hora de hacer cumplir las leyes existentes, algunas de las cuales están llamadas a evitar que gente que no debería tener acceso a las armas puedan comprarlas.

La excitación por poder ver a Trump fue una constante y ya se palpaba antes del comienzo del CPAC en los autobuses fletados por la organización, en los que un grupo de jóvenes tomaba asiento entre risas y gritos de “allá vamos”.

“Lo que hacemos es ayudarles, eso es lo que les hacemos a los hispanos”, terminó diciendo una de las integrantes del grupo rumbo a National Harbor.

El optimismo sobre el gobierno de Trump llega, un año después de su entrada en la Casa Blanca, hasta los republicanos que fueron sus detractores hace no mucho, como Zachary Zupen, quien en declaraciones a Efe reconoció que aunque estuvo en contra suya en las primarias republicanas, “lo está haciendo mejor de lo que esperaba”.

En este sentido, expresó su deseo de que “vuelva a ser candidato (en las presidenciales de 2020) si continúa así”.

Alex Kloss, un universitario de Pensilvania que accedió al CPAC con el objetivo de conseguir una foto con el presidente, aseguró a Efe estar “esperanzado” en la actuación de los republicanos de cara a los próximos años.

Trasladar la embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, la reforma fiscal y las decisiones en materia migratoria son los pilares que destacó el público conservador, que mira con esperanzas a los comicios legislativos de este año y ven en Trump el faro que les guía.

“Estoy súper ilusionada por él -Trump-”, espero que continúe siete años porque va a hacer muchísimo por este país“, incidió en declaraciones a Efe Quelia Mckinney, una estudiante llegada de Carolina del Norte.

Trump acudirá mañana, viernes, a National Harbor tras haberse estrenado en este encuentro en 2017, tras ser elegido presidente, después de que él mismo reconociera entonces que optó por no acudir en 2016 al pensar que podría ser “demasiado controvertido”.

Entonces, los asistentes al evento prefirieron a los senadores Ted Cruz y Marco Rubio, rivales del mandatario en las primarias republicanas, considerados entonces más presidenciables que él.

Ahora, la derecha populista también está presente en la edición del evento, que dio sus primeros pasos en 1974, mediante otros actores internacionales como la exdiputada del Frente Nacional Marion Le Pen y el exlíder del Partido por la Independencia de Reino Unido (UKIP) Nigel Farage.

Javier Pachón Bocanegra