Las tropas indias abaten a 9 supuestos insurgentes cerca de base atacada

Las fuerzas de seguridad de la India mataron hoy al menos a nueve supuestos insurgentes cuando trataban de cruzar la frontera entre este país y Pakistán, dos días después de que 18 soldados indios muriesen en un ataque a una base militar en la misma zona de Cachemira.

Una fuente del centro de control de la Policía del distrito de Baramulla, donde se produjo el enfrentamiento, indicó a Efe que las tropas habían matado a nueve insurgentes y precisó que la operación todavía sigue en marcha en la zona, aunque no pudo precisar más datos.

El suceso se produjo en el área de Uri, cerca de la frontera de facto entre la India y Pakistán, la Línea de Control (LoC), en la que también se ubica la base militar india atacada el pasado domingo.

Poco después, se produjo un segundo enfrentamiento entre supuestos insurgentes y las tropas indias en el vecino distrito de Kupwara.

El Comando Norte del Ejército indio confirmó en su cuenta de la red social Twitter que las tropas “frustraron intentos de infiltración por parte de terroristas en las zonas de Uri y Naugam”, donde continúan en marcha operaciones militares.

Según fuentes de seguridad citadas por medios locales, al menos un soldado ha muerto durante la acción en Kupwara.

Los incidentes se producen en medio de una creciente crisis diplomática entre la India y Pakistán, al que Nueva Delhi acusa de auspiciar las acciones en su territorio de grupos terroristas.

Al menos 18 soldados murieron el pasado domingo en un ataque contra una base militar en Cachemira, región que Nueva Delhi se disputa con Pakistán, al que el ministro de Interior indio, Rajnath Singh, responsabilizó inmediatamente de la acción y llamó “estado terrorista”.

Su histórico litigio por esa región, la única de mayoría musulmana en la India, les llevó a librar dos guerras y multitud de conflictos bélicos menores.

El ataque se produjo además en medio de una oleada de protestas violentas en Cachemira, que en los últimos dos meses y medio causaron al menos 85 muertos y más de 10.000 heridos, cientos de ellos con lesiones oculares, como consecuencia de perdigones para contener a los manifestantes.