Los grupos intentan consensuar hoy que existió policía política con Fdez Díaz

Los grupos parlamentarios intentarán hoy consensuar un texto que concluya que el Ministerio del Interior en la etapa de Jorge Fernández Díaz hizo uso de una policía “patriótica” para perseguir a políticos soberanistas y a otros rivales políticos, aunque el PP no comparte esa postura.

Será en el seno de la comisión de investigación de ese supuesto uso político creada en el Congreso, que se reúne a partir de las nueve de la mañana para poner sobre la mesa las conclusiones a las que ha llegado cada grupo y con el ánimo de acordarlas.

La mayoría ya las han hecho públicas después de haber escuchado las únicas cinco comparecencias que se han producido desde marzo y analizado los documentos que les han ido llegando.

En los poco más de cuatro meses de comisión han comparecido en la misma el exministro Fernández Díaz y el exjefe de la oficina antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso después de que salieran a la luz las dos conversaciones que fueron grabadas y que mantuvieron en el despacho del primero.

También han acudido el ex director general de la Policía Ignacio Cosidó, su entonces número dos, Eugenio Pino, y el inspector jefe asesor de éste José Ángel Fuentes Gago.

Según el PSOE, a cuyas conclusiones ha tenido acceso Efe, bajo el mandato de Fernández Díaz, “usando de manera fraudulenta el catálogo de puestos de trabajo, se creó una estructura bajo las instrucciones de Cosidó, por orden de Pino, con el conocimiento del ministro destinada a obstaculizar la investigación de los escándalos de corrupción que afectaban al Partido Popular”.

También, añade el PSOE, destinada al seguimiento, la investigación y, en su caso, la persecución de adversarios políticos, como este partido, Podemos o el nacionalismo catalán.

Unidos Podemos, por su parte, sostiene la existencia de una “policía política” que, al mando del exministro, empleó “sin control” recursos públicos para hacer “indagaciones extrajudiciales” contra rivales políticos, por lo que ha pedido remitir a la Fiscalía los indicios sobre estas prácticas.

ERC defiende que existió una “policía patriótica” que elaboró pruebas falsas y conspiró contra políticos catalanes con la bautizada como Operación Cataluña.

Mientras, el PNV sostiene “razonada y razonablemente” la existencia de “una intención de actuar -y actuando en numerosas ocasiones- contra adversarios políticos de un sector de ideología soberanista y de otro como el que representan algunos líderes de la organización política Unidos Podemos”.

Desde el PDeCAT se comparten estas opiniones y se asegura que en esa etapa funcionó una “policía política” con una dinámica “no democrática” parecida a “la utilizada durante el franquismo”.

Por el contrario, el PP opina que no ha quedado acreditado ese uso a pesar del “interés partidista” de la oposición de crear “artificialmente y sin pruebas” una supuesta policía política.