En libertad condicional por un cáncer al exlíder encarcelado Bo Xilai, según la prensa

Bo Xilai, el dirigente chino encarcelado por corrupción más conocido, ha sido liberado condicionalmente de la prisión donde cumplía una cadena perpetua debido a un cáncer de hígado, informó hoy Radio Free Asia.

Según la emisora, que se basa en una fuente próxima a la familia, el cáncer de Bo estaría en un estado inicial y sería tratable, al contrario que el cáncer terminal de hígado que sufre el premio Nobel de la Paz 2010 Liu Xiaobo, y del que también se informó esta misma semana.

Bo, de 67 años, fue condenado a una pena de prisión a perpetuidad en 2013 por corrupción, abuso de poder y recepción de sobornos, en un caso escandaloso que incluyó el asesinato en 2011 del hombre de negocios británico Neil Heywood.

La esposa de Bo, Gu Kailai, fue condenada a cadena perpetua por ese asesinato.

Bo se había forjado una cuidada imagen como una de las estrellas emergentes del Partido Comunista de Chino (PCCH) gracias a sus puestos como alcalde de la ciudad de Dalian (noreste), ministro de Comercio y secretario del partido en la municipalidad (región) de Chongqing.

Llegó a integrar el exclusivo Politburó del PCCH (formado por 25 miembros) y, gracias a su familia (su padre, Bo Yibo, fue un líder destacado en los años 80 y 90), llegó a rivalizar a comienzos de este siglo con el actual presidente chino, Xi Jinping, por colocarse en el lugar adecuado para llegar a la jefatura del Estado.

Por ello, su caída en desgracia constituyó uno de los casos de corrupción más graves que han afectado al régimen chino.

Bo habría sido diagnosticado de la enfermedad en la prisión pequinesa de Qincheng y enviado para recibir tratamiento a un hospital cercano a la ciudad de Dalian.