El nuevo ministro de Exteriores se dispone a nombrar con urgencia a sus altos cargos en la UE

Para estos dos cargos suenan con fuerza en los pasillos del Ministerio dos nombres, el de los diplomáticos Jorge Toledo y Alejandro Abellán, coinciden en señalar fuentes diplomáticas y del PP, si bien en la quiniela para el puesto de embajador han entrado recientemente otros dos nombres, el del actual embajador en Alemania, Pablo García-Berdoy, y José Pascual Marco, que fue durante varios años el número dos de Dastis en la Representación Permanente de España ante la UE y que ahora es director general en el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.

La designación de uno de estos dos últimos nombres a la Reper de Bruselas desplazaría a Abellán a una Embajada de la UE, como pudiera ser la de Lisboa, apuntan otras fuentes consultadas.

Toledo es en la actualidad director del Departamento de Asuntos Europeos y G20 en Presidencia del Gobierno, es decir, un estrecho colaborador del secretario general de Presidencia, Jorge Moragas, mientras que Abellán es director general de Coordinación de Políticas Comunes y de Asuntos Generales de la UE en el Ministerio y lleva trabajando en asuntos europeos desde 2008, con el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.

A uno y a otro ya quisieron promocionarles Moragas (a Toledo) y el anterior ministro José Manuel García-Margallo (a Abellán) cuando Iñigo Méndez de Vigo fue ascendido a ministro de Educación, Cultura y Deporte desde la Secretaría de Estado para la UE. Ante la falta de acuerdo, se optó por una solución intermedia, la del economista del Estado Fernando Eguidazu, que ocupa esta responsabilidad en la actualidad.

Dastis ha trabajado tanto con Toledo (coincidió con él en la presidencia española de la UE en 2002) como con Abellán y en los dos casos se trata de personas a las que respeta y aprecia, según fuentes de su entorno.

El nombramiento del secretario de Estado para la UE y el del representante permanente (embajador) ante las instituciones europeas se espera para los próximos días, bien en el Consejo de Ministros de este viernes o el siguiente. En el caso del embajador ante la UE podrá decidirse rápido porque los nombramientos de representantes permanentes en organizaciones internacionales no requieren de plácet previo (visto bueno del país de acogida).

LOS CAMBIOS EN OTRAS EMBAJADAS, A LA ESPERA DEL PLACET

Algo más de tiempo le llevará al ministro renovar las más de 60 embajadas que están pendientes de un nuevo jefe de misión desde hace más de un año (debido a la interinidad del Gobierno se paralizaron los nombramientos), ya que para las Embajadas bilaterales es preciso solicitar un plácet previo para el candidato, trámite que se aprueba en Consejo de Ministros.

El objetivo del plácet es permitir al país de acogida que haga una valoración del candidato para que, en caso de que la persona propuesta no guste por algún motivo, pueda solicitar al país que lo envía, antes de nombrarlo, que lo sustituya por otro. Es lo que pasó este año por ejemplo con el diplomático gay que el Gobierno francés de François Hollande propuso como embajador en el Vaticano. París desistió después de esperar 15 meses por un plácet que nunca llegó.

Una Embajada es precisamente el destino que ansía la gran mayoría de los cargos que formaron el equipo directivo del antecesor de Dastis, José Manuel García-Margallo. Tanto el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez, como el secretario de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Jesús Gracia, quieren irse de Madrid, por lo que en estos puestos también se esperan cambios.

En el Ministerio no se descarta que continúe en su puesto el actual subsecretario, Cristóbal González-Aller, y se asume que la actual consejera de prensa en la Representación Permanente de España en la UE, Ana María Rodríguez Pérez, acompañará a Dastis en Madrid.